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25 años de prisión por atentado en Neiva 1 23 abril, 2024
JUDICIAL

25 años de prisión por atentado en Neiva

25 años de prisión por atentado en Neiva 7 23 abril, 2024
José Alexander Cerquera Rojas (a la derecha) fue sentenciado a 25 años de prisión por el atentado al restaurante Don King Broster. Hernando Villanueva Alzate (izquierda) ya fue condenado por los mismos hechos.
A una pena de 25 años de prisión fue condenado José Alexander Cerquera Rojas, tras su participación en el atentado contra el restaurante Don King Broster, en el que resultó herida la empleada Vianey Gutiérrez Cano, en el 2012.

La sentencia fue proferida por el Juez Primero Penal Especializado de Neiva con Funciones de Conocimiento, quien además lo condenó a pagar una multa de 2.891’495.500 pesos a favor del Tesoro Nacional.

Cerquera Rojas fue condenado por los delitos de tentativa de homicidio agravado, tentativa de extorsión agravada, lesiones personales agravadas y daño en bien ajeno.

Para el togado fue clave el testimonio de Hernando Villanueva Alzate, quien lanzó la granada contra el restaurante, ubicado en la Avenida 26 con Calle 34 en el barrio Las Granjas.

El hombre manifestó en el juicio oral contra su compañero del atentado, que Cerquera Rojas conducía la motocicleta Pulsar, de placa CYI-40C, en la que llegaron al lugar. “Le dije que prendiera la moto, que era una bomba… en la URI le conté a Alexander lo de la granada”.

Villanueva reveló en el juicio que el atentado fue ordenado por alias ‘El Gato’. “Dijo (‘El Gato’) que nos fuéramos en la moto de él, que era más grande”.

Testigos del ataque reconocieron en las audiencias que Cerquera Rojas era la persona que se encontraba al otro lado de la calle en la motocicleta esperando al hombre que lanzó la granada. “Esperó cerca al lugar que dicha persona arrojara el arma de guerra, para luego con esta emprender la huida…”, sostuvo el juez.
El fiscal del caso sustentó que la participación del procesado en el atentado fue directa, “conocía lo que iba a ocurrir”.

El ataque fue ejecutado hacia las 11:35 p.m. del sábado 25 de febrero de 2012, cuando los empleados se encontraban recogiendo las mesas y sillas para cerrar el establecimiento. “Observé un tipo que tenía en las manos un casco, llegó a la puerta, pensé que iba a comprar, cuando lanzó algo y salió corriendo…”, dijo el propietario del restaurante a la Fiscalía.