La Nación
Medidas contra la pandemia 1 28 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Medidas contra la pandemia

 

Esperanza Andrade

La emergencia nacional y mundial por el coronavirus ha obligado a las autoridades a tomar medidas drásticas e inaplazables en salud, como la cuarentena nacional. También apoyamos las decisiones económicas adecuadas para aliviar la situación de los colombianos, en general, pero sentimos que no son suficientes aún. Se debe ir más allá para atender a la población más vulnerable. Es un universo inmenso, millones de personas, trabajadores del ‘día a día’, independientes, a quienes el virus les afecta directamente el bolsillo: el ambulante, el albañil, la niñera, el mesero, la manicurista, el peluquero, el fotógrafo, etc, quienes no cobran salario público ni privado.

En ese sentido hemos venido proponiendo emprender acciones que protejan y preserven las empresas, a empleadores, empleados y a sus familias. Que quienes lo necesitan reciban beneficio del sector financiero para así garantizar liquidez en la economía. Que los bancos tengan sentido humanitario y reduzcan en 50 puntos básicos la tasa de interés.

Exoneración de IVA a todos los productos, por término de dos meses prorrogables, hasta superar la crisis sanitaria; suspender el pago de aportes parafiscales, un tiempo prudente, para garantizar el salario a los trabajadores que cesen actividades, con el fin de no afectar la empresa privada en sectores de turismo, agropecuario, cultural, gastronómico y productivo, en general.

Es necesario y urgente suspender los pagos y aportes al Sistema General de Seguridad Social mientras dure la emergencia. Es momento de que el Estado determine y suspenda el pago de todos los gravámenes previstos en el sistema tributario. No se puede pretender que ante un cese generalizado de actividad económica las personas sigan contribuyendo de manera regular al Gobierno, más aún en un país donde la informalidad laboral es la constante.

Establecer un fondo de desempleo con un presupuesto ajustado y limitado para aquellas personas que a causa de la crisis sanitaria se queden sin empleo. Contemplar la posibilidad de autorizar y facilitar la producción de billetes, así como su circulación. Suspender el pago de hipotecas, con lo que se congelaría la cancelación de los créditos hipotecarios a quienes se hayan quedado sin empleo o sin ingresos temporalmente.

Contemplar la posibilidad de créditos respaldados directamente por el Estado por un valor determinado por la Presidencia; movilización de un porcentaje del Producto Interno Bruto para combatir la crisis, con aportes públicos y privados. Y pensar echar mano de las reservas monetarias internacionales que maneja el Banco de la República. Hoy suman 53.000 millones de dólares, ahorros del país para una calamidad pública como la actual.

En lo necesario comprometemos nuestra ayuda total en el Congreso para adelantar las reformas necesarias en busca de alcanzar más equidad, sostenibilidad financiera y fiscal. Como ha sucedido en el pasado, con medidas acertadas, confianza, fe y esperanza superaremos la pandemia.