La tala de varios árboles sobre la carrera Segunda de Neiva despertó la indignación de un sector de la ciudadanía. Aislado de ello, la CAM procedió a suspender el permiso de aprovechamiento forestal concedido a la Alcaldía. Los ejemplares sí se cortarán.
CATERIN MANCHOLA
El municipio de Neiva se quedó sin el permiso de Aprovechamiento Forestal Aislado sobre la carrera Segunda, entre la avenida La Toma y calle Quinta de la ciudad, otorgado por la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena – CAM, debido a que la autoridad ambiental halló serios incumplimientos en lo pactado.
Apenas y comenzó la tala de árboles los vecinos del sector mostraron su indignación a través de las redes sociales, asociándolo a una “tala indiscriminada”, “arboricidio” y a una “masacre ambiental”, pero lejos de todo ello, la Alcaldía sí contaba con el permiso que le fue concedido previo a un análisis y ayer este le fue suspendido por otras razones.
Un ciudadano mediante un video afirmó que “esperan al domingo para cortar todos los árboles, para acabar con lo poco que nos genera un poquito de frescura en la ciudad. Cortaron todos los arbolitos de la carrera Segunda”, lamentó.
Otro mediante el mismo mecanismo tildó el panorama de “impresionante” e hizo un llamado a las autoridades para que verificaran si se contaba con los permisos y las medidas de compensación. “No se sabe cuáles fueron los motivos, pero eso es reciente”, dijo.
De acuerdo con la autoridad ambiental, el municipio le solicitó una autorización de Aprovechamiento Forestal Aislado, para llevar a cabo las obras del proyecto del Sistema Estratégico de Transporte Público – Setp, de la ciudad, como rehabilitación y renovación de andenes y obras complementarias, entre otros. La tarea la venía cumpliendo un contratista, que alcanzó a intervenir 16 ejemplares.
Precisó la CAM que en total de 166 individuos forestales que conformaron el inventario, la autoridad regional autorizó el aprovechamiento de 46, de los cuales es importante mencionar que 19 árboles (el 41%) pertenecen a especies exóticas, como Oiti (11) y Pomarroso (4), e invasoras como el Neem (4).

El incumplimiento
Ayer martes se procedió a realizar una visita técnica al lugar tras haber recibido durante el fin de semana pasado, “denuncias sobre el posible aprovechamiento inadecuado de árboles”. Encontrando un “incumplimiento a las condiciones establecidas en el permiso de Aprovechamiento Forestal”, informó la Corporación.
La autorización indica que, como medida de compensación para dicha intervención se trazó la relación 1:20, es decir, por cada árbol aprovechado se deben compensar 20, para un total 920 árboles a reponer. Esto no se ha cumplido a cabalidad.
En detalle, “460 individuos forestales nativos del Ecosistema Bosque Seco Tropical deben, concertadamente con la CAM, plantarse y realizar el respectivo mantenimiento por un año, hasta alcanzar los 1,5 metros de altura mínima”, informó.
“Los otros 460 árboles adicionales serán entregados a la Corporación para su siembra en áreas ambientalmente estratégicas de la ciudad de Neiva enfocadas hacia la protección de la ronda de las fuentes hídricas urbanas”, agregó.
Además de lo estipulado en la compensación, el proyecto vial urbano contempla la plantación de 60 árboles en el sardinel central de este mismo tramo de la obra.
Por eso, “la Corporación procedió a imponer medida preventiva que establece la suspensión inmediata del aprovechamiento forestal, hasta tanto se cumpla con las condiciones de manejo ambiental establecidas en la autorización y que garantizan la minimización de los impactos ambientales”.

“Algunos pueden salvarse”
Vigilar que se cumpla lo establecido y velar por la naturaleza ha sido la tarea desde la Secretaría de Medio Ambiente de Neiva, según recalcó el vocero de la dependencia Octavio Cabrera Cante, al ser consultado por este tema, que no deja de causar malestar en la ciudadanía.
Aunque la CAM otorgó un permiso tras haber realizado un análisis del trazado de la obra para identificar que la alternativa, presentada desde la administración, requería el menor número de árboles a intervenir, y que las especies a aprovechar no se encontraran en alguna categoría de amenaza o en peligro de extinción, ayer el Secretario afirmó que están intentando salvar a algunos ejemplares de especies como mango y mamoncillo, ubicados en medio del andén que divide los carriles.
Según el funcionario, la Secretaría hizo una visita técnica y presentarán una propuesta para “reorganizar el tema”. Pero subrayó que dentro del grupo a talar, hay individuos con una gran inclinación, con graves enfermedades, otros, como el Neem, producen esterilización para los animales y están dañando el pavimento y alcantarillado. De ahí la necesidad de llevar a cabo la tala.
“Está mandado a recoger en Neiva y por donde esté, es un árbol que hay que sacarlo, no obstante, hay otros que sí se pueden defender buscando que se acomode el ambiente y la construcción a ellos”, precisó.
Además, en esa inspección corroboraron otras falencias relacionadas con la disposición de la biomasa. “Estamos viendo un mal manejo de la materia orgánica por parte del contratista del Setp, porque no es la empresa la que ha hecho la disposición de estos materiales sino un contratista al cual le estamos haciendo seguimiento y estamos muy pendientes, de que hagan el menor daño en función de un desarrollo sostenible para la ciudad”, dijo.
Y recordó el Secretario de Medio Ambiente que el municipio está obligado a cambiar el servicio de transporte público por buses eléctricos, que es lo que propone el Setp, con más de 200 vehículos que reduciría la producción de gas carbónico en la ciudad.

Las obras
Desde el Setp afirmaron que la obra avanza satisfactoriamente en un 42%. Y hasta el cierre de esta edición no habían sido notificados formalmente por parte de la CAM sobre la suspensión del permiso, en todo caso, esto no supone un problema mayor, no afecta el desarrollo de los demás trabajos que comprende el proyecto urbanístico.
El Setp debe velar porque el contratista cumpla lo pactado y es este quien ejecuta tanto las obras de infraestructura, como la tala y compensación ambiental que acarrea en particular dicha fase del proyecto.
Una vez que se surtan las medidas compensatorias la CAM devolvería el permiso y continuaría el aprovechamiento forestal.
