Las tres personas asesinadas en la vereda Bajo Horizonte del corregimiento de Chapinero en Neiva, fueron identificadas como Carlos Alberto Capera Silva y Jorge Eliécer Silva, víctimas de desplazamiento forzado y Mesías Pajoy Sabogal, exintegrante de la extinta guerrilla de las Farc. Cada uno recibió un disparo en la cabeza.
Hasta la vivienda donde se encontraban las tres personas, llegaron hombres armados con pistolas y asesinaron a Carlos Alberto Capera Silva y Jorge Eliecer Silva, quienes era víctimas de desplazamiento forzado y Mesías Pajoy Sabogal, ex integrante de las extintas Farc, que perteneció a la columna ‘Teófilo Forero Castro’, y en el año 2010 se desmovilizó de manera individual.
LA NACIÓN conoció minuciosos detalles de este homicidio colectivo, que pone en jaque la labor de las autoridades, con el fin de dar captura de los responsables y determinar con exactitud las causas de lo acontecido.
Los disparos
De acuerdo con versiones oficiales, cada persona recibió un disparo en la cabeza, provocado con un arma 9 milímetros; los cuerpos de Carlos Alberto Capera Silva y Jorge Eliecer Silva, (tío y sobrino), se encontraron en el ingreso de la vivienda, uno en la puerta y el otro dos metros más adelante, en una de las habitaciones estaba el cuerpo del excombatiente, quien al parecer, intentó buscar ayuda, pero finalmente fue acribillado.
En la vivienda de acuerdo con las pesquisas de las autoridades, no se hallaron armas de fuego, solo algunos teléfonos celulares que están en poder del CTI, y están siendo analizados.
Igualmente, este crimen queda descartado como un intento de hurto, pues a pesar de que la masacre se cometió dentro de la vivienda, en el inmueble no fue hurtado ningún objeto, y pese a que algunas de las cosas fueron cambiadas de lugar, la acción denotó que los criminales iban en busca de algo en específico.
Dos desplazados y un excombatiente
Las víctimas paradójicamente y pese a tener pasados similares en cuanto a temas del conflicto, se conocían al parecer desde hace muy poco, cuando presuntamente los familiares Silva, llegaron desde la ciudad de Neiva, hasta la vereda Bajo Horizonte, zona rural del corregimiento de Chapinero, en busca de trabajo, y se encontraron con Mesías Pajoy Sabogal, quien durante años integró las filas de las Farc, y era conocido con el alias de ‘Pastor’.
Al parecer, llevaban muy poco en la vereda, distante a más de siete horas del casco urbano de la capital opita y la cual limita con el Tolima; no eran conocidos, su estadía era de forma esporádica y misteriosa.
Versiones
En poder de las autoridades hay algunas versiones que están siendo analizadas, donde presuntamente, señalan a este hombre de pasado oscuro y que había sido expulsado del proceso de reincorporación por haber cometido una falta catalogada como gravísima, porque al parecer aún seguía cometiendo actividades ‘non sancta’, a nombre del extinto grupo armado ilegal. Esta información está siendo verificada y es una de las hipótesis de los investigadores.
Para las autoridades no está descartada la responsabilidad de que los perpetradores de esta masacre, sean disidentes, sin embargo, todo está sujeto a investigaciones y pese a que pueden existir testigos de lo sucedido, en la zona impera la ley del silencio.
De acuerdo con el comandante de la Novena Brigada de Ejército, coronel Jhony Bautista, “queda totalmente descartado, que este hecho violento tenga relación con el ocurrido hace un par de meses, donde también fue asesinado un desmovilizado, el homicidio no se desprende de la actividad que, como desmovilizado está persona desempeñó. Lo sucedido prende las alarmas, y nos obliga a no bajar la guardia y a no darle tregua a la delincuencia en esta zona, que siempre ha querido tener el dominio”.
Recompensa
Frente a esta difícil situación, fue convocado por las autoridades competentes, dos Consejos de Seguridad, donde se concertó una recompensa de $10 millones de pesos del Fondo de Seguridad, para quien dé a conocer información que permita el esclarecimiento de los hechos y la judicialización de los responsables, con la garantía de la absoluta reserva. Así mismo, incrementar la oferta institucional a través de un trabajo integral, fortalecimiento de la capacidad armada y un esfuerzo adicional de inteligencia militar.
Los cuerpos sin vida de Carlos Alberto Capera Silva y Jorge Eliecer Silva, quienes residían en el barrio Bosques de San Luis, en el sur de la capital opita, fueron trasladados a Neiva, donde serán sepultados; el cuerpo del exFarc de 63 años de edad, aún no ha sido reclamado por sus allegados.