FERNANDO POLO/LN
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La salida de la guerrilla de las Farc de territorios como Caquetá, Putumayo, Cauca y Meta, hicieron que estos lugares fueran colonizados por los sembradores de cultivos ilícitos, que con tal de sembrar sus cultivos llevaron la deforestación a 178 mil hectáreas el año pasado.
A los cultivos ilícitos se suman los comerciantes de madera ilegal, que tiene al departamento del Huila como su corredor principal para sacarla a los mercados de ciudades como Bogotá y Cali.
Para controlar todos estos flagelos las autoridades de Policía, Ejército Nacional, Ministerio de Ambiente y Desarrollo y la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena- CAM, se unieron y conformaron una “burbuja ambiental” que se encargará de ahora en delante de hacerle frente a todas las personas que se atrevan a cortar un árbol.
La nueva estrategia fue presentada en Neiva por el viceministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Alberto Botero López, quien en la presentación dijo que lo que se busca con estas nuevas medidas es que la gente tome conciencia del cambio climático que estamos viviendo y ayuden a cuidar los recursos naturales.
“El trabajo en el Huila es muy importante porque el departamento es un corredor por donde sale toda la madera ilegal del sector de Putumayo, Caquetá y Cauca, su ubicación permite que los ilegales lo utilicen para sacar los cargamentos a lugares como Bogotá, Cali y Medellín”, dijo el viceministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Alberto Botero López.
Agregó que el Huila no es un departamento que tenga una tasa alta de deforestación, pero si es muy importante que desde aquí se controle la zona limítrofe con otros departamentos donde las Farc ocupaban territorios que están siendo habitados con distintos propósitos.
“Ustedes saben que con el posconflicto las Farc han salido de muchos territorios del país y están llegando otras fuerzas que generan esta deforestación buscando aumentar su frontera agrícola, la ganadería o cultivos ilícitos”, advirtió Botero López.
MÁS HERRAMIENTAS
El viceministro anunció que en el Congreso cursa un proyecto que busca facilitarles más herramientas jurídicas a las autoridades para que puedan proceder ante los abusos que se cometen contra el medio ambiente.
Porque lo que se está viendo hasta ahora, es que si las autoridades cogen un cargamento de madera, los responsables en la mayoría de los casos quedan libres a los pocos días y por ello no se detiene la explotación ilegal de madera.
“Lo que queremos es a través de ese proyecto de ley darle más herramientas a la Fiscalía y a los jueces para que le den más peso a los delitos ambientales. Por ejemplo que el delito ambiental tenga delitos conexos como el lavado de activos y concierto para delinquir, entre otros”, aseveró el viceministro.
LAS CIFRAS
En el año 2000 la deforestación a nivel nacional llegaba a las 200 mil hectáreas, en el 2015 se logró bajar esa cifra a 124 mil hectáreas. Pero con la salida de las Farc de territorios apartados los cultivos ilícitos se dispararon, la frontera agrícola también se amplió y la cifra volvió a subir, llegando en 2016 a 178 mil hectáreas, que significa un aumento del 44% de la deforestación en Colombia.
Entretanto, el director de la CAM, Carlos Alberto Cuéllar, expresó que como autoridad ambiental están prestos a colaborar en todo lo que sea necesario para controlar el tránsito de madera ilegal por el departamento.
“En el Huila la deforestación solo llega a 180 hectáreas, pero si nos afecta toda la madera que sale de los departamentos vecinos. Con la conformación de la “burbuja” esperamos contribuir con el control a la deforestación.
“Es muy importante la visita del viceministro y la articulación con las diferentes autoridades y el Gobierno Departamental como líder del proceso, lo que buscamos es precisamente seguir controlando este flagelo que constituye el tráfico de madera principalmente procedente de los departamentos de Caquetá, Putumayo y Cauca”, dijo Cuéllar.
Asimismo, el comandante de la Novena Brigada, coronel, Óscar Armando Rodríguez, dijo que están desarrollando un trabajo de control y vigilancia en las zonas donde más se presenta este flagelo, que son los municipios de Saladoblanco, Acevedo, Palestina y Pitalito.
“En lo corrido de este año llevamos treinta capturas por el delito de tráfico de madera ilegal, principalmente de roble que viene del departamento de Caquetá, anotó el coronel Rodríguez.
El departamento del Huila es corredor por donde sale la madera ilegal de los departamentos del sur colombiano.