Con ayuda del Ejército y la Policía Nacional, el capellán del Batallón Pigoanza del municipio de Garzón, padre Eberto Pertuz, recorrió los barrios de la capital diocesana, para bendecir a los garzoneños que cumplen con el aislamiento preventivo obligatorio para mitigar la propagación del Covid-19.
Los habitantes del municipio abrieron las puertas de sus casas y se arrodillaron para orar y pedir que esta crisis que atraviesa el Huila y el país por el coronavirus acabe pronto.
“Agradecemos a toda la comunidad de Garzón que con gozo y alegría recibieron a Jesús en la eucaristía que pasó visitando todos los barrios de Garzón y a las familias, para que esa bendición, ese deseo grande de conocer y ver a Jesús los siga iluminando y fortaleciendo en el diario vivir. Cada familia, cada persona que con generosidad y amor doblegó sus rodillas ante Jesús pidiendo por la sanación, por la liberación. Que Dios Todopoderoso expanda esa bendición a todos los hogares de nuestra comunidad y que sepamos que todos estamos en la misma barca y que tenemos que ayudar a remar todos juntos, que Dios nos va a ayudar a salir victoriosos y nosotros con un corazón abierto y quebrantado, acudimos al único que nos salva, Jesús”, resaltó el sacerdote Pertuz.
“Agradecemos la Policía Nacional y al Ejército y a cada una de las personas que nos colaboraron y que hicieron esto posible, Dios los siga bendiciendo, estando con Dios nada debemos temer”, finalizó.
