Se trata del productor del corregimiento de Bruselas, Javier Sanjuán Gómez, uno de los pocos cultivadores que se ha atrevido a impulsar su café con denominación de origen, y que ahora lo tiene como una de las marcas más apetecidas y reconocidas en el contexto regional y con una gran proyección a nivel nacional.
Y es que se ha puesto de moda llegar a Pitalito o al centro poblado de Bruselas y tomarse un Boscafé, como se denomina la marca de Sanjuán, en una de sus tiendas.
Herencia de familia
Javier sanjuán forma parte de las nuevas generaciones de caficultores, quien como la gran mayoría de productores de esta región crecieron en medio de los viejos cafetales al lado de sus padres, de quienes aprendieron las primeras lecciones de la producción del que hoy se constituye en el mejor café del mundo.
Su cultivo se ubica en la finca Bellavista, de la vereda Villa Fátima, del corregimiento de Bruselas en Pitalito, de dónde saca la materia prima para la elaboración del producto que, luego del proceso de liofilización, (congelado y posterior eliminación de agua), ofrece a los visitantes en las tiendas, que son constantemente visitadas por propios y turistas en el Valle de Laboyos.
Su experiencia de 34 años en las lides del café le ha permitido recorrer todos los escenarios del sector, desde la siembra con sus propias manos de sus primeros árboles, a ser representante se los productores del sur del Huila en el Comité Mundial y Departamental, varias veces presidente de esos organismos, hasta ser su embajador en eventos internacionales en Londres y Nueva York.
Pasión por la calidad
Desde el año 2006, un año después de que don Ricaurte Hernández, obtuviera para Pitalito el primer lugar en el concurso Tasa de la Excelencia promovido por la Federación Nacional de Cafeteros, Sanjuán sabe que su café puede llegar muy lejos e inicia el proceso de participación en esa competencia que pronto pone su café entre los mejores del mundo.
Fue finalista en varias ocasiones, y en la convocatoria del 2008 ocupó la segunda posición en el concurso, lo cual lo llevó a vender su café a compradores de Tokio Japón, donde desde esa época la firma Maruyama Coffee Visit, de Kentaro Maruyama, lo sirve en exclusivos clubes de la capital nipona
“Mis expectativas en Agroexpo es dar a conocer la calidad del café que producimos los campesinos en las montañas del sur del Huila, que la gente que tome nuestro café sepa que en el aroma y el sabor, va también parte del alma del caficultor huilense”, dijo Sanjuán.
