Ocho días después de haber iniciado el paro cafetero y en vista de que no se vislumbra ninguna solución, sus dirigentes anunciaron que están dispuestos a marchar hasta Bogotá para ser escuchados. Ocho días después de haber iniciado el paro cafetero y en vista de que no se vislumbra ninguna solución, sus dirigentes anunciaron que están dispuestos a marchar hasta Bogotá para ser escuchados. HUMBERTO SOSA SIMBAQUEVA LA NACIÓN, GARZÓN Como preocupante calificaron los garzoneños la situación que viven después de una semana de paro, porque las manifestaciones campesinas han mantenido paralizado el pueblo y la gente ya no aguanta más, mientras los líderes campesinos amenazan con marchar hasta Bogotá. Algunos campesinos comenzaron a tener problemas por enfermedades estomacales y fuertes contagios de virosis, generadas por las fuertes lluvias, el terreno que se volvió pantanoso, las letrinas públicas que comparten y el agua que no ha sido controlada para el consumo humano. Previo a la jornada de ayer, los comerciantes presidieron una reunión en donde hacían presencia el alcalde Delio González y el comandante de Policía Huila, coronel Juan Francisco Peláez, por el cual exigieron levantar el toque de queda o reglamentarlo. “Pues no es justo que mientras a los campesinos de Garzón se les ha maltratado en más de tres oportunidades y desde helicópteros les han enviado gases y otros elementos, aquí por orden del Alcalde y de la Policía se nos mantenga secuestrados e indefensos”, dijo Eibar Giraldo, dirigente de organizaciones sociales. Asimismo, los coordinadores del bloqueo entre Garzón y Gigante precisaron estar dispuestos a mantenerse hasta las últimas consecuencias. “Estamos un poco cansados físicamente, pero es por el maltrato que recibimos la semana pasada por el Esmad. Entre hoy martes y mañana miércoles tenemos que tomar una determinación, si es posible nos tomamos la plaza de Bolívar en Bogotá”, dijo Armando Acuña Molina. Pérdidas El paro está arrojando enormes pérdidas a los municipios del centro del Huila. La leche está estancada y ya empezó a perderse porque los finqueros no la pueden trasportar hasta Neiva, además la producción de huevos y pollo también se afectó. El transporte de crudo y todo tipo de combustibles se paralizó y los camiones de carga están parqueados desde mediados de la semana anterior. “Aquí hay un fenómeno grave y es que hasta el viernes en la tarde los cafeteros estaban dejando pasar vehículos cada tres horas, pero la entrada del Esmad con ataques a los cambuches y a la misma integridad de la gente acabó con todo, porque de inmediato se armaron las barricadas y el taponamiento es total en todo el sur del país”, dijo Ernesto Salazar, dirigente de Garzón. Los campesinos que mantienen los bloqueos en el centro del Huila, anunciaron que de ser necesario marcharán a Bogotá para que los escuchen.