El ministro de Juan Carlos Esguerra, manifestó que aunque el recapturado narcotraficante Phanor Arizabaleta Arzayuz, cumplió la pena impuesta por las autoridades judiciales norteamericanas que lo deportaron al país, este aun tiene requerimientos y deudas pendientes con la justicia colombiana y por esta razón fue ordenada su captura tras su llegada al aeropuerto El Dorado. LA NACIÓN, Bogotá El ministro de Juan Carlos Esguerra, manifestó que aunque el recapturado narcotraficante Phanor Arizabaleta Arzayuz, cumplió la pena impuesta por las autoridades judiciales norteamericanas que lo deportaron al país, este aun tiene requerimientos y deudas pendientes con la justicia colombiana y por esta razón fue ordenada su captura tras su llegada al aeropuerto El Dorado. “Lo extraditamos en su momento a petición de las autoridades judiciales norteamericanas. Allá entiendo que se le impuso una pena de 8 meses, pena que cumplió y luego lo deportaron las autoridades norteamericanas cumplida esa pena. Regresó a Colombia y aquí tiene deudas pendientes con la justicia que naturalmente tendrá que pagar, puesto que tiene requerimientos de varios despachos judiciales que estamos en trance de hacer efectivos”, indicó el alto funcionario. En este sentido,Esguerra reiteró que “en cuanto haya deudas pendientes con la justicia colombiana hay que ponerle la cara a la justicia y pagar esas deudas en prisión o en dinero según sea el caso”. El jefe de la cartera de justicia sostuvo que “la mayoría de las extradiciones que se están tramitando en los últimos tiempos tienen que ver con delitos relacionados con el narcotráfico”. Arizabaleta Arzayús, quien fuera el quinto hombre en importancia del Cartel de Cali, encabezado por los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela fue recapturado al llegar a Bogotá. La detención se hizo efectiva con base en una orden emitida por un juez de la ciudad de Cali por el delito de secuestro extorsivo, siendo condenado a 20 años de prisión, los cuales deberá enfrentar tras purgar una corta pena en territorio norteamericano, la cual comenzó a hacerse efectiva con su extradición el 28 de Junio de 2011. Una vez fue notificado de su detención, Arizabaleta Arzayús fue conducido a la unidad de sanidad del terminal aéreo en la capital de la República, debido a un procedimiento quirúrgico al cual había sido sometido, ordenándose su posterior traslado a la Clínica Shaio por recomendación médica, lugar en el que es custodiado por personal de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN), encargada de su captura. En sus inicios, este hombre se convirtió en pieza fundamental para legalizar los insumos que eran importados por los Rodríguez Orejuela para la producción de clorhidrato de cocaína, logrando escalar posiciones hasta ser empoderado para manejar todas las acciones de secuestro y extorsión del Cartel de Cali, siendo responsable entre mucho hechos, del homicidio del entonces Comandante de la SIJIN en Buga (Valle), ocurrido el 7 de Junio de 1995 luego que participara en varias diligencias de allanamiento a sus propiedades. Casi un mes después, Phanor Arizabaleta se entregó a las autoridades siendo condenado a 28 años de cárcel por el mismo delito que se le imputa hoy, logrando años después el beneficio de detención domiciliaria en virtud de una cirugía a corazón abierto, no obstante lo cual fue sorprendido por la Policía el 16 de abril de 2003 cuando se desplazaba entre Cali y Candelaria en compañía de un dragoneante del INPEC y su conductor. El 16 de septiembre de 2010 fue nuevamente capturado por la DIJIN, con base en un procedimiento coordinado con la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), siendo requerido en extradición por tráfico de estupefacientes en alianza con carteles mexicanos. Enseguida la Policía Nacional en coordinación con la Fiscalía dio inicio a unja nueva etapa de investigación e identificación de bienes y movimientos financieros para el lavado de activos, confirmándose además de la posesión de varios inmuebles en el Valle, la Costa Atlántica y los Llanos Orientales, su participación como accionista en un ingenio azucarero.