El empresario Carlos Mattos recibió su primera condena por haber planeado y puesto en marcha un estratégico plan para alterar el sistema de servicios en los juzgados civiles municipales de Bogotá y redireccionar una acción de tutela que había radicado su defensa en medio de un litigio internacional que tenía por la comercialización de los vehículos de la marca coreana Hyundai.
El juez tuvo en cuenta el agravante de las conductas que ejecutó el empresario para lograr sus oscuros objetivos y obtener un beneficio económico.
En el análisis del caso se manifestó que tras resultar beneficiado Mattos envió un mensaje negativo a la sociedad al demostrar que la administración de justicia se podía torcer por dinero y que aquel que tuviera los recursos podía lograr lo que quisiera.
Teniendo en cuenta lo anterior, el empresario Carlos Mattos debería pagar una condena de 11 años y 4 meses de prisión, una inhabilidad de 9 años y seis meses de prisión y 283 salarios mínimos legales para el año 2013.
Pero, debido a que aceptó los cargos por preacuerdo, Sin embargo, se le rebajó en una sexta parte, por lo que la pena definitiva quedó en 113 meses, es decir, nueve años, cinco meses de prisión, la inhabilidad de 96 meses y una multa de 701 salarios mínimos para el año 2015.
La defensa de Mattos anunció que presentará recurso de apelación el cual deberá ser resuelto por la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá.
Con información de: Semana