Respetado Alcalde reciba un cordial saludo. Le escribo movido por mi interés de aportar a que las cosas empiecen a cambiar en materia de seguridad. De acuerdo con una publicación realizada en este mismo diario, llegamos a la cifra record de “56 hurtos en cinco días”, lo cual da un promedio alarmante de 11,2 hurtos por día. Al hacer una revisión empírica de los reportes, videos y relatos, es posible apreciar elementos comunes que comparten la gran mayoría de los hurtos. Así, por ejemplo, se puede identificar la predominante participación de hombres, el uso de motocicletas de baja y mediana cilindrada y el uso de armas de fuego de corto alcance.
Hasta acá, no hemos dicho nada nuevo y sorprendente. Sin embargo, siento que los neivanos contamos con “toneladas” de información que podríamos procesar con la ayuda de la inteligencia artificial -IA-, con el fin de identificar patrones que permitan crear e implementar estrategias preventivas. Sería muy interesante que la Alcaldía de Neiva liderara un piloto para el uso de la IA como principal herramienta para anticiparse al crimen. Con el uso de esta herramienta, las autoridades de policía y de tránsito podrían ser más eficientes y eficaces en la instalación de retenes orientados al decomiso de armas blancas y de fuego, así como a la recuperación de motocicletas hurtadas y “gemeleadas” para el crimen.
Sumado a esto, la Alcaldía podría ir adelantando trabajo, con la instalación de puntos de control y escaneo con rayos x, de las maletas y encomiendas que llegan y salen desde la terminal de transporte de Neiva. Recordemos que por los altos y volátiles precios de los tiquetes aéreos y por la ausencia de otras opciones, como la férrea o la fluvial, el transporte terrestre ha sido y seguirá siendo el medio de transporte predominante. En materia de crimen, esto es relevante, debido a que son pocos o nulos, los controles que se le hacen a las maletas y a la paquetería, ofreciendo una importante y barata opción para que los criminales puedan transportar tranquilamente, elementos como armas de fuegos y granadas. Quiero concluir reiterando la idea de que la lucha contra el crimen no siempre implica el uso intensivo de recursos económicos y humanos. Ha llegado la hora de que los datos criminales dejen de atiborrar las primeras planas de los diarios y comiencen a trabajar para nosotros.