En varias ciudades del país ayer se desarrolló un segundo día de protestas en rechazo a la reforma tributaria, mientras el presidente Iván Duque anunció que no desmontará el polémico proyecto de ley. El Comité Nacional de Paro ratificó el llamado a una nueva jornada de movilizaciones para el próximo 18 de mayo.
Lucía Sánchez
El país vivió ayer un segundo día de Paro Nacional, luego de que el comité organizador convocara otra jornada de protestas para rechazar la reforma tributaria presentada por el Gobierno ante el Congreso de la República.
En ciudades como Bogotá, Medellín, Cali, Bucaramanga, Popayán y Nariño, organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles nuevamente protestaron con arengas y pancartas, exigiendo que la Ley de Solidaridad Sostenible como la ha denominado el Gobierno, sea retirada inmediatamente. A pesar de los masivos reclamos, el presidente Iván Duque reiteró que el proyecto de ley seguirá tramitándose.
Y es que ayer en su intervención realizada para medios nacionales, el mandatario fue contundente al indicar que no será descartada la reforma. Por el contrario, indicó que las puertas del diálogo están abiertas para que los miembros de los partidos políticos den su opinión e ideas para potenciar esta propuesta fiscal.
Es así que las movilizaciones continuaron pese a los múltiples llamados de las autoridades para suspenderlas en momentos en que el país enfrenta la letal tercera ola de la pandemia de COVID-19, que ayer nuevamente rompió un récord con 505 muertes.
Desde muy temprano se reportaron cacerolazos, plantones y marchas como parte de las manifestaciones pacíficas en el marco del paro nacional. Las autoridades implementaron controles para evitar que se repitieran algunos hechos de vandalismo registrados durante la primera jornada de protestas, pero en la tarde de ayer en varias ciudades se volvieron a dar fuertes enfrentamientos entre manifestantes y la Fuerza Pública.
Ciudades principales
En Bogotá, los manifestantes se concentraron al mediodía en la plaza de Bolívar, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, pero la fuerte lluvia que cayó en este sector de la ciudad hizo que los capitalinos se disolvieran. No hubo ningún acto vandálico.
Durante la noche, ciudadanos finalizaron la protesta pacífica desde sus hogares mediante el cacerolazo. Por otro lado, en Bogotá el número de manifestantes bajó significativamente en comparación con los registrados el miércoles, aunque hubo bloqueos de vías, cortes en el servicio de transporte y choques aislados con el Esmad.
Mientras Cali completó otro día tenso por los bloqueos y choques entre manifestantes y la Policía en varios puntos de la ciudad.
Diego Molano, ministro de Defensa viajó a Cali por las dificultades de orden público que vive esta ciudad.
“En Cali los vándalos no van a impedir que el personal médico, oxígeno y vacunas lleguen a la mayoría de la población de la capital del Valle”, señaló.
Las autoridades del departamento informaron que durante la jornada de ayer la ciudad sufrió nuevamente los embates de los violentos que atacaron e intentaron saquear comercios por lo que fue necesario que el Escuadrón Antidisturbios de la Policía acudiera a los lugares que fueron blanco de los vándalos.
En Medellín igualmente se vivió otra jornada de protestas y de desmanes, pues el plantón programado en el parque de Las Luces se salió de control y terminó en disturbios.
En el país, por el momento se han convocado dos nuevas marchas: la del Día Internacional de los Trabajadores, el 1 de mayo y otra para el 19 de mayo, siendo ese el día reconocido para un nuevo Paro Nacional.
Para este primero de mayo la Central Unitaria de Trabajadores CUT Huila programó una nueva movilización la cual iniciaría las 8 de la mañana en el Centro de Convenciones José Eustasio Rivera.
A la espera de nuevas movilizaciones también está sobre la mesa la pandemia, por lo que el llamado general es al autocuidado, pues si bien no se puede negar el derecho a la protesta, sigue primando el bien general y la vida, y la meta hoy es evitar un nuevo colapso en el sistema hospitalario.
Sentido homenaje a Juan Diego
Un sentido homenaje, realizaron en la noche de ayer familiares y amigos de Juan Diego Perdomo Monroy, el joven universitario quien falleció, al parecer de muerte natural, en medio de las protestas contra la reforma tributaria que se realizaron el miércoles en las calles de Neiva.
A sus escasos 21 años de edad, Juan Diego Perdomo cursaba sexto semestre de Artes Escénicas en la Universidad Surcolombiana y residía con su madre en el oriente de la ciudad.
Muy conmovido, su tío Sergio Monroy aseguró que “Juan Diego tenía dificultades cardiacas heredadas de su padre, que falleció por esa causa hace ya varios años en Neiva”.
Sus amigos y familiares lo recordarán como un joven que llevaba en su sangre el amor por la danza.
Su vena artística procedía de la familia, pues sus tíos fueron parejas de las reinas en el baile del sanjuanero de las fiestas de San Pedro, en Neiva. Su interés por aprender lo llevó a estudiar también en academias de danzas y fue bailarín en un show de música electrónica.
Ayer en el colegio Ceinar los compañeros del joven universitario realizaron una velantón. También pintaron un mural en su homenaje.
