La Policía comenzó en firme la aplicación del decreto que regula el uso de parrillero en Florencia. La decisión se tomó para prevenir desórdenes en el uso del transporte público. La Policía comenzó en firme la aplicación del decreto que regula el uso de parrillero en Florencia. La decisión se tomó para prevenir desórdenes en el uso del transporte público. ÓSCAR NEIRA LA NACIÓN, FLORENCIA Tal como se previó desde hace un mes, se inició ayer el control de motos en el marco de la implementación del Decreto 0261, que restringe el uso de parrillero en el microcentro de Florencia. Los operativos comenzaron a ser desarrollados gracias al convenio firmado entre la Alcaldía de Florencia y la Dirección Nacional de la Policía, lo cual garantizó la presencia de por lo menos 45 policías de Tránsito más en la ciudad. El comandante de Tránsito de Florencia, teniente Fabián Álvarez, sostuvo que “arrancamos con los controles de motos como parte de la aplicación del decreto. Será progresivo no sólo en cuanto a la cantidad, sino a los requisitos que le vamos a pedir a quienes manejan motos”. “También les decimos a los conductores que tengan en cuenta que deben usar cascos y se controla la cantidad de ocupantes de cada moto. Es un plan que tiene que ver además con cambiar la conducta de quienes conducen motos. Todas las infracciones comunes también serán sancionadas durante estos controles”. Chaleco El oficial hizo énfasis en que además del tema relacionado con el decreto para regular el mototaxismo, la Policía estará muy pendiente del uso del chaleco durante las horas de la noche. “Los comparendos que dan inmovilización son la ausencia de la revisión técnico mecánica, del seguro obligatorio y no poseer la licencia de conducción. En caso de que la persona la posea, tiene una hora para subsanar la falta, pero no se le inmoviliza el vehículo. Llamamos la atención sobre la utilización del chaleco”. “No podíamos ejercer el control sobre estos asuntos por la ausencia del convenio, pero ahora ya tenemos la posibilidad de desarrollar estos controles. A la ciudadanía si no le tocan el bolsillo no entiende y por eso vamos a comenzar una campaña para empezar a utilizar el chaleco”, afirmó el teniente Álvarez. Inconformismo Por su parte, la comunidad manifestó su inconformismo con “unas medidas que afectan al que menos tiene que ver”. Ángel Ricardo, un motociclista de Florencia, dijo a LA NACIÓN que los controles “están muy estrictos, ya no se puede andar ni con la familia ni con nadie. Las medidas se toman en aras de acabar con el mototaxismo pero están perjudicando a la comunidad en general. Y estas medidas no contribuyen en el fondo a solucionar el problema del mototaxismo. Mi familia está compuesta por seis personas y ya me toca salir a las ocho de la noche para movilizarme tranquilamente”. Entre tanto, Eduardo Morales consideró que no tiene inconvenientes con la exigencia de los documentos de rigor. “Puedo decir que la Policía cumple órdenes; el problema es de la alcaldesa, ella debería pensar en las consecuencias de estas medidas. Lo satisfactorio es que exijan los papeles, el tema de la seguridad vial. A mí lo que me parece absurdo es lo del parrillero. En estos momentos mi esposa está enferma y tengo que andar buscando alternativas por estas medidas tan absurdas”, aseveró. Otro ciudadano conocido como Eider Ramírez, expresó que no está de acuerdo con el Decreto 0261. “Me ha afectado en mis labores de trabajo y en las familiares. A mi esposa la tengo que dejar a cinco cuadras de su lugar de trabajo y yo no puedo ni movilizarme con los compañeros en asuntos netamente laborales. A mí no me parece que por restringir a los mototaxistas nos perjudiquen a quienes no laboramos en eso”, dijo. Al finalizar el día de ayer, la Policía contabilizaba más de un centenar de motocicletas inmovilizadas y la ciudadanía manifestaba un enorme descontento con el férreo control. Las grúas no paraban de transportar motos inmovilizadas.