La Nación
Consejos de juventud, otro engañoso conversatorio 1 19 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Consejos de juventud, otro engañoso conversatorio

Rodolfo Valderrama

 

Muchos repudiarán a quienes habitualmente escribimos criticando nuestras instituciones o sus procesos, son opiniones respetables; ¿pero será que alguna institución o proceso ha funcionado adecuadamente salvo la corrupción?, veamos algunos casos: sistema de salud, campeón de las tutelas por mal servicio; el carcelario, centro de tortura y escuela del delito; pensiones, poca cobertura y enorme déficit; empleo formal, desplazado por el tortuoso rebusque; código de policía, no ha evitado ataques de perros furiosos ni genocidas al volante; sistema electoral, sinónimo de compra de votos; Congreso, el órgano más corrupto y repudiado. Próximamente tendremos elecciones para conformar Consejos Municipales de Juventud (CMJ), según Duque el acontecimiento político más importante después de la Constituyente, magnificación y exageradas expectativas cuando en realidad es un contentillo; algo similar, guardando proporciones, a la cédula real que otorgó un día libre a esclavos para paliar sufrimientos y que continuaran sumisos; en Colombia tenemos muchas frustraciones, la Revolución en marcha de López Pumarejo, la Reforma agraria de Lleras Camargo, el Acuerdo de paz sin reformas e inocuo ante la creciente violencia.

Próximamente tendremos elecciones para los CMJ; no puede negarse cierta sagacidad y malicia de Santos y Duque para imponer procesos y eludir reformas estructurales; el primero con su máxima, “El modelo social y político es intocable”, logró condiciones inequitativas para la insurgencia, dada la torpeza y ambición de sus dirigentes; el resultado,  una vergüenza mayúscula, pues el solo hecho de 1.200 asesinatos entre líderes sociales, excombatientes y ambientalistas obnubilan ciertos beneficios del Acuerdo. Duque ha logrado sortear dos fuertes presiones populares, la de 2019 con el engaño del conversatorio, durante tres meses se trataron multitud de temas, nada se solucionó. El embeleco de los CMJ fue la respuesta para dividir y manipular las fuertes protestas juveniles por falta de oportunidades; el relativo éxito oficial ha tenido la férrea unión de la clase dominante (Ejecutivo, legislativo, gremios, iglesia, represión y hasta paramilitarismo anti-protesta), mientras la contraparte se caracteriza por desunión, egoísmo, desconocimiento de la problemática e ingenuidad.

Los CMJ presentan varias falencias, las campañas están lideradas por partidos tradicionales culpables de nuestra tragedia social, liberal, conservador, uribismo, etc., promueven sus candidatos hasta por televisión, nada nuevo podrán ofrecer; dado que la mayoría de municipios tendrán su consejo es de esperarse  infinidad de temas, la mayoría locales, las propuestas generales como salud y trabajo deben ir al Congreso, enemigo del cambio; las funciones de dichos consejos son muy limitadas, entre otras gestión, veeduría e impulsar ciertas acciones como emprenderismo, estrategia fracasada ante el altísimo desempleo juvenil; además la mayoría de jóvenes tiene total desconocimiento de la problemática nacional, por tanto tendremos pocas propuestas razonables; entonces, el gobierno mediante este contentillo habrá logrado su objetivo, continuar con sacaculismos y sostener un país con los mismos privilegiados.