La Nación
Corrupción en las altas esferas 1 19 marzo, 2024
COLUMNISTAS

Corrupción en las altas esferas

El gran escándalo que puso en el ojo del huracán al Gobierno nacional por cuenta de los millonarios contratos suscritos entre el Estado y la esposa del entonces asesor de la Presidencia Andrés Mauricio Mayorquín, deja al descubierto el entramado politiquero que se mueve en todos los niveles, la forma como altos funcionarios abusan de sus cargos y la falta de vigilancia de los órganos internos de control.

El asunto se relaciona con el presunto tráfico de influencias y falsedad del asesor de Presidencia –quien omitió informar su vínculo matrimonial con una contratista-, quien al parecer utilizaba su posición y cercanía con el presidente Duque, para gestionar contratos para su esposa en varias entidades, no solo del Gobierno central, sino de otros niveles como la Gobernación de Cundinamarca, la Personería de Bogotá e incluso la Alcaldía de la Capital.

Karen Liseth Váquiro esposa del hoy ex asesor de Palacio suscribió 24 contratos bajo la modalidad de contratación directa con diferentes entes estatales, que sumaron más de 1.200 millones de pesos para ejecutarlos al mismo tiempo y en unos pocos meses.

Este nuevo escándalo de corrupción del Gobierno Duque deja perplejo a todo el país, pues es inaudito que se hayan evadido todos los controles legales existentes para la vigilancia de la contratación con el Estado y que alguien haya podido suscribir esta cantidad de contratos sin ningún inconveniente. ¿Cómo una persona podía ejecutar tantas obligaciones con varias entidades al mismo tiempo? ¿Quién revisaba sus informes de ejecución? Estos y otros interrogantes merecen pronta respuesta.

Es indiscutible que estos contratos se le otorgaron a la megacontratista, no porque la respectiva entidad lo requiriera o por su hoja de vida, sino por las redes de tráfico de influencias que llegan hasta los más elevados niveles.

Este episodio pone en evidencia las falencias en los controles existentes y la forma como desde el alto gobierno se despilfarran los recursos de los colombianos en una época de grave crisis económica y ajuste fiscal.