La Superintendencia de Salud tomó la decisión de intervenir a la Solsalud al determinar en el interior de la EPS problemas administrativos, financieros y contables. LA NACION, Bogotá La Superintendencia de Salud tomó la decisión de intervenir a la Solsalud al determinar en el interior de la EPS problemas administrativos, financieros y contables. La intervención se dio desde el pasado 27 de marzo y durará dos meses, según reveló la entidad ayer. La intervención operará tanto en el régimen contributivo como subsidiado. Solsalud cuenta con 1,1 millones de afiliados en el régimen subsidiado y 150.000 en el régimen contributivo. La decisión obedeció, entre otros factores, a las graves deficiencias detectadas en la prestación de servicios, a la abultada cartera acumulada con sus proveedores y a que enfrenta embargos por un monto superior a los $68.000 millones, precisa la Superintendencia de Salud. Dentro de las medidas adoptadas por la entidad, se decidió la remoción de su cargo de Fabián Rolando Méndez Cáceres, represente legal de Solsalud. Como agente interventor fue nombrado Mario Alberto Rojas, quien será el encargado de realizar un inventario de los pasivos y activos de la entidad. La medida de fue oficializada en la Resolución número 671 de la Supersalud, “por medio de la cual se adopta medida cautelar preventiva de toma de posesión inmediata de los bienes, haberes y negocios y de intervención forzosa administrativa” de los componentes de Solsalud”. Con la medida, la Superintendencia Nacional de Salud pretende proteger y garantizar la prestación de servicio a dos millones 820 mil afiliados en el régimen subsidiado y de un millón 492 mil 730 personas inscritas en el programa del régimen contributivo. Cabe recordar que el pasado 20 de marzo, ante la demora prolongada en la entrega de los medicamentos que requiere su hija y la desatención a sus reclamos cada vez que visitaba la EPS Solsalud en busca de una solución, Andrea Rayo, madre de una menor de 7 meses, decidió encadenarse a las afueras de la entidad con su hija en brazos, para exigir la atención debida. Según la mujer, la rabia y la indignación la llevaron a realizar la protesta.