La Nación
EDITORIAL

Déficit por TLC

Contrario a los promisorios anuncios hechos sucesivamente por el Gobierno Nacional, previos a la firma de los múltiples Tratados de Libre Comercio (TLC’s), y que daban cuenta de expectativas altamente positivas tanto para el empleo como para la producción nacional, las contundentes cifras de 2012 indican que, hasta ahora, los TLC’s que están vigentes han permitido que aumente la compra en el exterior de bienes, más que incrementar en las ventas de las firmas colombianas a esos socios comerciales. Contrario a los promisorios anuncios hechos sucesivamente por el Gobierno Nacional, previos a la firma de los múltiples Tratados de Libre Comercio (TLC’s), y que daban cuenta de expectativas altamente positivas tanto para el empleo como para la producción nacional, las contundentes cifras de 2012 indican que, hasta ahora, los TLC’s que están vigentes han permitido que aumente la compra en el exterior de bienes, más que incrementar en las ventas de las firmas colombianas a esos socios comerciales. Es decir, la relación costo – beneficio es deficitaria para el país y ha acentuado la balanza comercial a favor de nuestros socios comerciales y en defecto de las cifras nacionales. Como se dijo por parte de todas las voces críticas contra los TLC, nos hemos aliado y creado acuerdos de intercambio con países evidentemente más fuertes, con unas economías de altísimo nivel que, por supuesto, llevan enorme ventaja en la relación bilateral. Al cierre del 2012 el país tenía vigente acuerdos comerciales con 19 países, contando a la Comunidad Andina y Mercosur, relación de vieja data, y con excepción de la CAN y México, el año pasado se redujeron los despachos de Colombia a esos mercados. Los analistas ya habían advertido que el impacto del enfriamiento de las economías de la región y la lentitud o recesión en los países desarrollados, se iban a reflejar en las exportaciones, aunque cabe señalar que la desaceleración se ha sentido menos en Colombia que en otras economías. Pese a esta notable balanza negativa, otros aseguran que no es malo que crezcan las importaciones si se tiene en cuenta que buena parte del aumento corresponde a bienes de capital, lo cual quiere decir que las empresas colombianas están comprando equipo, seguramente con más facilidades que antes de los acuerdos. Pero a su vez es innegable que toda importación de bienes que acá también se produzcan, afecta el empleo y los ingresos de un sinnúmero de colombianos. Ahora bien, en el caso particular  de Estados Unidos, el principal socio comercial del país, se vendieron 21.979 millones de dólares, apenas 10 millones más que el año pasado, de los cuales el 75 por ciento son bienes tradicionales, y los únicos grupos que registraron crecimiento fueron agropecuarios (sin flores ni banano) y agroindustriales, en tanto que las compras de productos “gringos” crecieron 3,4 por ciento, principalmente de maquinaria y equipo, químicos y derivados del petróleo. Igualmente es preocupante que se hayan estancado las ventas a Chile, que en los últimos años habían sido uno de los compradores más dinámicos de Colombia. En 2012, quedaron levemente por debajo de los 2.200 millones de dólares y aunque la mitad es petróleo, la otra porción es diversa. Estamos pues ante un primer panorama negativo, de balanza comercial desbalanceada dándoles la razón a quienes siempre manifestaron su oposición. Sin dejar de considerar que todo TLC tiene ganadores y perdedores, por ahora vamos perdiendo como país. “Sin dejar de considerar que todo TLC tiene ganadores y perdedores, por ahora vamos perdiendo como país”. EDITORIALITO Importante el papel cumplido por los personeros frente al paro cafetero. Los agentes del Ministerio Público, ejercen la vigilancia y permanecen al lado de sus delegaciones, sólo como garantes. ¿Dónde estarán los concejales, diputados, alcaldes  y demás dirigentes?