La Nación
Desde pequeña me gusta el trabajo social: Alcaldesa de Palermo 1 24 abril, 2024
HUILA

Desde pequeña me gusta el trabajo social: Alcaldesa de Palermo

Natalia Caviedes Chinchilla, primera alcaldesa del municipio de Palermo elegida por votación popular, se ha caracterizado por el trabajo social que desempeña desde el colegio. Como mujer al frente de los destinos de la población ha sentido el machismo. “No nos sienten capaces de liderar y obtener buenos resultados…”, expresó la mandataria.

 

Rafael Rodríguez C.

rafael@lanacion.com.co

 

“Hemos demostrado que las mujeres nos destacamos por nuestra inteligencia, pasión, amor por cada cosa que realizamos, el compromiso y responsabilidad innata…”, expresó Natalia Caviedes Chinchilla, quien se ha convertido en la primera mujer en ser elegida por votación popular como alcaldesa del municipio de Palermo.

La joven, palermuna de nacimiento y estudiante de derecho, no solo se destacó como estudiante en lo académico sino por el trabajo social que desde el colegio adelantó.  “Desde pequeña me gusta el trabajo social, estar con las personas, escuchar las necesidades colectivas”, manifestó.

Natalia, la menor de cuatro hijos, nació en el seno de una familia de origen campesino y sus recuerdos la llevan a una infancia rodeada naturaleza. “Mi infancia transcurrió entre los paisajes de esta bella tierra. Siempre en contacto con la naturaleza, el campo, junto a mis tías, mi abuela, mis primos y hermanos”.

La joven mandataria recordó que la educación en la familia fue fundamental para adelantar el trabajo con honestidad y disciplina. “Mis papás, de origen campesino, trabajaban y sacaban adelante el hogar donde me llené de valores, principios y disciplina. Mis padres además me legaron el esfuerzo, la tenacidad, el amor y la unidad”.

Aunque de niña no se le pasó por su mente ser alcaldesa de su municipio, si tenía el espíritu no solo de liderazgo, sino participar en procesos de elección y ayudar a las personas necesitadas. “Ser alcaldesa, en ese entonces (niña) no era algo que tuviera en mente. Sin embargo, siempre me ha caracterizado el liderazgo, la participación en procesos de elecciones en el colegio, generando propuestas para el bienestar de mi salón de clases o de la institución en general. A demás desde pequeña me gusta el trabajo social, estar con las personas, escuchar las necesidades colectivas”.

Ese trabajo social y la necesidad de ayudar a las personas necesitadas la llevaron a aterrizar en el mundo de la política. “El amor por el trabajo social, con las comunidades. Un profundo deseo de transformar y mejorar las cosas, para quienes más lo necesitan”.

Además encarno en ella la aspiración de su padre de ser alcalde de la localidad. “Quien me inspiró a estar en el escenario político fue mi padre, quien siendo docente siempre soñó con ser alcalde, claramente no lo podía ejercer. Pero me heredó una agenda en donde plasmó cada una de las propuestas que soñaba para los palermunos. Eso me enamoró y desde ahí comprendí que se podía hacer un trabajo social importante”.

Su llegada a ese mundo político en Palermo donde era liderado por hombres no cayó bien y comenzó a sentir el machismo en toda su expresión. “Hay mucho machismo tanto en hombres como en mujeres. A pesar de los esfuerzos y cambios actuales hay mayores señalamientos, irrespeto, no nos sienten capaces de liderar y obtener buenos resultados…”.

Natalia no se ha dejado amilanar y ha logrado demostrar con trabajo su liderazgo. “Hemos demostrado que las mujeres nos destacamos por nuestra inteligencia, pasión, amor por cada cosa que realizamos, el compromiso y responsabilidad innata, en diferentes áreas, deportivo, educativo, político, empresarial, entre otros”.

Por ahora no está pensando en su futuro, su mente está puesta en terminar su gestión como alcaldesa y sacar adelante su municipio.  “Por ahora el único objetivo en el que estoy centrada es en hacer una muy buena administración, dejar un buen legado. En no desfallecer en los propósitos. En continuar haciendo las obras que prometimos y en que progresivamente las personas comprendan que sí pueden elegir diferente, por personas que les apuesten a las comunidades, con ideas renovadoras en pro del bienestar de la población. En el futuro esperaré lo que Dios depare y muestre en el camino”.