Albeiro Castro Yépez
El resultado del Índice Departamental de Competitividad 2018 que recientemente presentó el Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario nuevamente desnudó una realidad que aceptamos pero no enmendamos, somos muy buenos para realizar ejercicios de planeación, pero, muy lentos para su ejecución, en el caso específico del turismo, la ejecución no supera el 30% en cada uno de los seis lineamientos estratégicos propuestos para un horizonte final que se trazó al año 2020. Pero lo simpático no es resultado, sino, la respuesta que la Directora del organismo evaluador le dio a la periodista que la entrevistó, a la pregunta, ¿Qué debemos hacer los huilenses para mejorar estos indicadores? la tajante respuesta de la Directora fue ¡despierten! finalmente eso es lo que nos pasa, nos quedamos dormidos dando vueltas como corcho en remolino realizando ejercicios de diagnóstico que al final no se utilizan para la ejecución en los diferentes planes de desarrollo tanto regional como en los municipales.
Ante un nutrido inventario de acciones por realizar, hoy me ocuparé de traer a la memoria las más sentidas necesidades de investigación aplicada para el desarrollo de ecoturismo, aventura y turismo de bienestar. En el caso del ecoturismo, se ha identificado el aviturismo como una tendencia que para el Huila resulta promisoria por la amplia oferta de escenarios naturales con este contenido, si bien, actualmente se realiza una consultoría en este lineamiento, ya se percibe que muchas zonas no serán caracterizadas, entre ellas, el costado oriental del Parque Nacional Natural Puracé a la altura del Centro Poblado de Morelia en el municipio de Saladoblanco, tarea que se convierte en una oportunidad para que una universidad con programa de formación profesional en biología o ingeniería ambiental la asuma con sus estudiantes como línea de investigación aplicada que les permita acceder al título profesional de su disciplina académica. En materia de aventura la oportunidad la presenta el río Magdalena que demanda la caracterización para navegación recreativa en botes tipo rafting en los tramos Bordones-Oritoguaz y La Guaira-La Jagua, así como, el río Negro de Narváez en el tramo Nátaga- Nolasco, un trabajo que requiere la integración de estudiantes de educación física, biología e ingeniería ambiental. En bienestar el termalismo también ofrece oportunidades para investigación aplicada, las fuentes termales de Morelia en Saladoblanco y las de Nátaga, necesitan caracterización fisicoquímica, estudio ambiental y diseño arquitectónico para el balneario termal.
En suma, el grito herido ¡despierten! Encuentra respuesta en estas tres acciones en las que las universidades se pueden comprometer aportando documentos técnicos que permitan su desarrollo, contribución que subsana la limitada disponibilidad presupuestal de los entes territoriales para la realización de estos estudios y apoya al Departamento en su propósito de diversificar su oferta turística.