Hombres armados no identificados asesinaron a tres campesinos en zona rural de este productivo municipio en la noche del pasado martes. LA NACIÓN visitó la población y recogió relatos e imágenes de una jornada luctuosa.
Lucía Sánchez
La tranquila noche del martes en la humilde casa de la familia Betancourth Gómez, ubicada en la vereda Santa Lucía, zona rural de Algeciras en el oriente del Huila, se vio interrumpida por balas, llanto y muerte.
Sobre las 8:00 p.m. tres hombres armados con pistolas llegaron hasta la vivienda de los campesinos preguntando por armas y un dinero, esculcaron la casa y al no encontrar lo que buscaban, asesinaron con tiros de gracia a Jimmy Betancourth Ortiz de 43 años, padre de esta familia; a su hijo mayor, Jimmy Alejandro Betancourth Gómez de 25 años; y a un empleado de la finca, identificado como Johan Camilo Narváez Rayo, de 18 años de edad.
La masacre fue lenta. Mientras los sujetos encapuchados y vestidos de negro se ensañaron contra los tres hombres, la esposa del campesino y sus dos pequeñas hijas de 6 y 8 años de edad presenciaban la terrible escena.
Según relató una fuente humana a LA NACIÓN, los victimarios revolcaron la casa en busca de supuestas armas y dinero, pero no encontraron nada. “La escopeta que había en la vivienda la tiraron hacia el patio, se llevaron seis celulares y el poco dinero que tenía en los bolsillos el padre de familia. En su partida lanzaron improperios y señalaron que las víctimas eran objetivo militar”.
El campesino de 43 años de edad habría recibido 12 disparos, su primogénito 8 y el joven trabajador de la finca 2. En medio del terror, una de las pequeñas hijas de esta familia pudo contar uno a uno los impactos que segaron las tres vidas.
Ante la orden de abandonar la vivienda, la esposa del propietario de la finca junto a sus dos pequeñas emprendió la huida por una loma hacia la casa de los vecinos más cercanos, aproximadamente a 15 minutos del lugar, allí se resguardaron del horror.
Esta es la finca propiedad de la familia Betancourt Gómez, ubicada en la vereda Santa Lucía donde ocurrió la masacre.
La casa donde ocurrió la matanza está ubicada sobre una pendiente y distante de otros domicilios del sector, por lo que los gatilleros no temieron ser descubiertos y se tomaron su tiempo para cometer el crimen, indicaron las autoridades que visitaron el lugar de los hechos.
Escenas de profundo dolor se vivieron ayer en la Estación de Policía de Algeciras. Familiares de las víctimas fatales, con desconsuelo lamentaban la pérdida de sus seres queridos.
Según logró establecer LA NACIÓN, tras su asesinato, el campesino Jimmy Betancourth Ortiz deja huérfanas a dos pequeñas de 8 y 6 años y a dos adolescentes. Mientras su hijo mayor, Jimmy Alejandro Betancourt Gómez, deja a un niño de tan sólo un año.
Del joven Johan Camilo Narváez Rayo, de 18 años de edad, quien también fue ultimado en esta masacre, se conoció que era un algecireño que se dedicaba a laborales agrícolas en diferentes fincas del municipio.
La personera Municipal de Algeciras, Esther Cabrera Hernández, informó que el Ministerio Público no ha recibido denuncias de amenazas hacia esta familia. Igualmente reveló, que la esposa del campesino de 43 años asesinado, se desplazó del predio y la vereda donde ocurrió la masacre.
Parientes de las víctimas fatales de este hecho de sangre que enluta nuevamente a ‘La Despensa Agrícola del Huila’, desmintieron tener relación alguna con la familia de Álvaro Barrera, actualmente desplazado de la zona y padre de un reincorporado.
Sin hipótesis
El Coronel Edwin Montañez, comandante operativo y de seguridad ciudadana de la Policía Huila expresó que “el martes siendo aproximadamente las 11:00 de la noche, fuimos informados por parte de un ciudadano residente en el municipio de Algeciras, que en la vereda Santa Lucia se había registrado el homicidio de tres personas. Enseguida se realizaron las coordinaciones con el personal del Ejército Nacional para llegar al sitio, unidades adscritas a Policía Judicial adelantaron los actos urgentes y la recolección de información, que nos ayudará a determinar los móviles y presuntos responsables de este hecho criminal”.
Las calles de Algeciras estaban militarizadas el día de ayer.
El coronel indicó además que aún no se tienen hipótesis sobre el caso. Complementó que los hechos ocurrieron en la vereda Santa Lucía, aledaña a Quebradón Sur, donde el pasado 16 de julio seis sujetos fuertemente armados asesinaron a cuatro personas e hirieron a dos más, hecho que generó una serie de desplazamientos en la población.
Es de recordar, que días previos a esa masacre, fue capturado uno de los hombres de confianza de alias el Paisa, el rearmado jefe guerrillero de la disidencia de las Farc autodenominada como Nueva Marquetalia.
Se trata de Domingo Ramos Cortés, alias Hermes, quien, al igual que el Paisa, también apoyó inicialmente el Acuerdo, pero en 2018 se reagrupó con miembros de la Teófilo Forero, el grupo de las Farc que no solo se encargó de darle seguridad al secretariado, sino de cometer algunos de los más duros golpes que propinó esa guerrilla.
Este año la violencia se ha recrudecido en Algeciras. Según las autoridades, en los primeros 9 meses de 2020 se han presentado 21 asesinatos, siendo los campesinos, líderes sociales y excombatientes el principal ‘blanco’.
Los desplazamientos forzados superan los 300 casos en lo corrido del año, mientras las amenazas y extorsiones no dan tregua.
Ya son 12 los consejos de seguridad realizados en el municipio durante 2020, los cuales han dejado un sinnúmero de compromisos por parte de las autoridades quienes aseguran que intensificarán operativos para lograr resultados; sin embargo, poco avanzan en las investigaciones y los hechos de violencia continúan.
Con la alerta temprana 043 la Defensoría del Pueblo advirtió recientemente sobre el riesgo en que se encuentra Algeciras ante una inminente disputa por el control territorial debido a presencia de cuatro facciones de disidentes de las Farc-Ep en el municipio.
Algeciras: dos masacres en 2020
Julio 16 Vereda, Quebradón Sur: En este hecho fueron asesinados Luz Stella Burgos Mabesoy de 34 años, Edinson Sebastián Moya Muñoz de 16 años, Luis Eduardo Gómez Marulanda de 22 años y Juan David Bello de 25 años.
Septiembre 22 Vereda, Santa Lucía: En esta ocasión las víctimas fatales son Jimmy Betancourth Ortiz de 43 años, Jimmy Alejandro Betancourth Gómez de 25 años; y Johan Camilo Narváez Rayo, de 18 años de edad.
¡Sí son masacres¡
El Observatorio de Conflictos, Paz y Derechos Humanos de Indepaz, entiende por masacre como el homicidio intencional y simultáneo de varias personas (3 o más) protegidas por el Derecho Internacional Humanitario (DIH), y en estado de indefensión, en iguales circunstancias de tiempo, modo y lugar.
Según indepaz, en lo corrido del 2020 se han registrado 62 masacres en Colombia.