La Nación
¿Dos ministros insensatos? O quizá atrevidos y visionarios 1 24 abril, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

¿Dos ministros insensatos? O quizá atrevidos y visionarios

Tan censurable es la perversidad de las minorías, como la tolerancia o complicidad de las mayorías, esto es aplicable al planteamiento del Ministro Prada, independientemente de algunas ligerezas que no desvirtúan la esencia del mensaje; al considerar la importancia de la presión popular y si es del caso la  movilización para respaldar reformas estructurales, surgieron fuertes críticas especialmente del uribismo y afines, que esto sería Incendiario, violar la Ley,   irrespeto al honorable Congreso…, monumental contradicción por la infinidad de faltas de los legisladores contra sus electores, con encomiables excepciones, la última “Jugadita” la relató el excandidato Hernández ante Caracol, “Nos citaron a las 9:00 a.m. el día jueves 1 de septiembre, esperé hasta las 12 m., como nadie llegó nos dijo el presidente de Comisión, tranquilos nos vemos la próxima semana”, además de irrespeto esto es delito por cobrar sin trabajar.

Para los referidos críticos mencionar la presión popular es irrespeto al Congreso, pero no es censurable el ausentismo impune, incumplir promesas, legislar a favor de sus financiadores o aprobar reformas tributarias regresivas. A propósito la propuesta   tributaria es progresiva (A mayor riqueza mayor porcentaje de impuesto) y el apoyo mayoritario a Petro ha sido burocrático, pero no nos engañemos, al votar una reforma progresiva para reducir concentración de ingresos y desigualdad, será negada o cambiada, entonces la advertencia del Ministro Prada es razonable. Además la Constitución prevé la Consulta Popular, ¿será que Petro se atreve?, ¿Será que el pueblo despierta o continúa tolerante con las minorías?

De otra parte la Min-Minas Irene Vélez, pese a su planteamiento confuso sobre el  Decrecimiento, esto corresponde a una sólida teoría que cada vez tiene más fundamento, se opone a la falacia neoliberal que formula el Crecimiento Económico como única forma de acabar pobreza, inequidad y lograr bienestar para todos; no bastan 200 años extrayendo recursos del subsuelo para quemarlos, envenenar la atmósfera, alterar el clima e infestar ríos y mares con cerros de desechos, sino que esto debe continuar por muchas décadas, fracturando la tierra, acabando el  agua y perforando  profundidades del mar, todo para satisfacer al insaciable poder económico y responder al mayor consumo poblacional.

El debate sobre la sobrepoblación se abandonó, también para defender intereses del poder económico (Mediante los bajos salarios), y las iglesias para incrementar sus fieles, dado que el desborde poblacional propicia la pobreza y la desinformación; lástima que la teoría del Decrecimiento trate de manera marginal el tema poblacional. Las teorías del Crecimiento Económico no han logrado el bienestar para todos, al  contrario tenemos más pobreza e inequidad, más caravanas huyendo del hambre y el evidente deterioro ambiental; ojalá más temprano que tarde aceptemos las virtudes del Decrecimiento, y no ocurra una hecatombe o el terrible vaticinio de Malthus, dada nuestra irracionalidad y la ambición de las minorías.