El presidente Iván Duque firmó la reforma que da cárcel de por vida a violadores y asesinos de niños en el país. Sin embargo, falta su reglamentación y el visto bueno de la Corte Constitucional.
La reforma constitucional que permite la condena a cadena perpetua de asesinos y violadores de niños en Colombia fue promulgada ayer por el presidente Iván Duque. El acto legislativo que modifica el Artículo 34 de la Constitución Política colombiana, se realizó en la Casa de Nariño y contó con la presencia de la primera dama, María Juliana Ruiz, la ministra del Interior, Alicia Arango y otros funcionarios del Gobierno.
“Quería ser presidente de Colombia para sacar adelante, con el Congreso de la República, esta importante transformación. Le estamos cumpliendo al país con un trabajo entre todos los partidos, que demuestra que para la defensa de los niños hay un criterio de unidad”, señaló el mandatario.
El jefe de Estado también recordó el “talante, espíritu y legado de una gran mujer como lo fue Gilma Jiménez, quien ejerció la política con principios y convicciones y nunca dejó de tener el ímpetu de hacer realidad esta reforma legislativa, por lo que este acto llevará su nombre”.
Además, lamentó todos los casos de violencia sexual contra menores de edad que han sacudido al país, como el de la menor Yuliana Samboní. “Hoy Colombia da un paso trascendental porque a pesar de 13 años de constantes procesos logramos sacar adelante este artículo en virtud de que los derechos de los niños están por encima de los demás”, aseguró Duque y añadió que “Colombia le dice no a los hampones que usurpan la inocencia de los niños y le decimos no a aquellos que han tratado de silenciarlos”.
Entre las condiciones se han determinado casos en los que a la violación del menor se sume el homicidio, el secuestro o la tortura, o cuando la comisión del delito genere un rechazo generalizado en la sociedad.
Aunque causó gran polémica, la norma contó con el apoyo de los partidos Centro Democrático, Conservador, Cambio Radical, Partido de La U, Liberal y algunos parlamentarios de la Alianza Verde. Se opusieron el Polo Democrático, el partido Farc, la Colombia Humana, y algunos senadores se negaron a votarlo como Roy Barreras, Rodrigo Lara y Gustavo Petro. Finalmente fue aprobado el 18 de junio en el Senado con 77 votos a favor y 0 en contra.
Cabe destacar que esta reforma contempla que a los 25 años de pena perpetua se podrá revisar la misma para que un juez determine si el condenado tiene posibilidad de resocialización. De ser así, podrá haber modificación de la pena privativa de la libertad.
Lo que sigue
Todavía faltan varios pasos para que la cadena perpetua entre en vigencia, etapas que podrían dañarle el caminado. El Gobierno tiene un año para reglamentarla e incluirla en el Código Penal. Después, la reglamentación que debe presentar el Gobierno debe ir a trámite al Congreso para ser objeto de discusión y votación.
Pero para que la cadena perpetua sea una realidad en el país en la práctica deberá superar un examen ante la Corte Constitucional y ya son varios los abogados penalistas y constitucionalistas que han anunciado que demandarán la constitucionalidad del proyecto, a esto se suma la postura histórica de este tribunal que, en materia de sanción penal, ha estado a favor del sentido de la resocialización de las penas, el cual defiende que el castigo impuesto por el juez es una herramienta para reeducar y rehabilitar a la persona condenada. Esto sin contar que serían necesarias reformas al Código Penal, al Código de Procedimiento Penal y al Código Penitenciario y Carcelario, por eso se anticipa que la reforma podría desvanecerse y no ver la luz.