Hace unos días, mediante un video aficionado, se puso al descubierto a dos policías motorizados de la ciudad de Bogotá, que compraban supuestamente un celular robado y lo pagaban con dosis de droga.
ALEXANDER MOLINA GUZMÁN Hace unos días, mediante un video aficionado, se puso al descubierto a dos policías motorizados de la ciudad de Bogotá, que compraban supuestamente un celular robado y lo pagaban con dosis de droga. También en días pasados, en la misma ciudad, un Juez de la República ordenó que dos policías fueran trasladados a la cárcel de la Picota, por haberle prendido fuego a un habitante de la calle. Y por aquí en nuestra tierrita, por el Huila, vimos en video el desalojo que por la fuerza realizó la policía a los campesinos que protestan por la forma en que han sido desprotegidos de sus derechos, para favorecer los intereses de la poderosa multinacional Emgesa, en la construcción de su represa de El Quimbo. Desalojo en el cual un campesino prácticamente perdió un ojo por la acción brutal de la policía que realizó el operativo. Y aquí hay que decir, que al parecer al Comandante de la Policía del Huila le excita e incita a la violencia, pues él dijo que a los menores que se enfrente armados contra la policía serán dados de baja en franca lid; prácticamente, los invitó a batirse a duelo con la policía. Y esta excitación e incitación a la violencia le parece tan normal, que tranquilamente salió a decir que el desalojo realizado contra los campesinos que están siendo afectados por la construcción del Quimbo, se hizo con las “garantías constitucionales”. A mí me late que la Constitución que él está interpretando es “pirata”; pues, según él, le permite dejar tuertos a diestro y siniestro. Al Comandante de la Policía del Huila hay que pedirle que calme su sed de sangre, e interprete la verdadera Constitución como es y en lo que le compete. Que no venga por aquí a engatusarnos con la idea que “Bogotá, está 2.600 metros más cerca de la estrellas”, que por aquí esto es tierra de nadie y que es como el “lejano oeste”: Que esto es apunta de sangre y fuego. Señor comandante, ¡más respetico por la tierrita y con los de la tierrita! Y al conjunto de la Policía, por lo últimos desafortunados hechos que han cometido, hay que decirles que deben ser ejemplares en sus acciones, pues ustedes están para proteger la vida y honra de todas las personas sin ninguna distinción. Que si quieren ser tratados como héroes, deben ganarse ese trato no a punta de propagandas mediáticas. La mejor propaganda que se pueden dar es dignificando su labor y honrando la vida de todos los ciudadanos.