La opita Érika Álvarez Gónzalez hoy solicita ayuda para regresar urgente al país para someterse a un tratamiento médico. Se quedó sin dinero y su salud cada vez empeora.
Érika Álvarez González está viviendo un calvario en México, la pandemia del covid-19 le impidió regresar al país y a la ciudad de Neiva, debido al cierre de fronteras y aeropuertos. Lleva cinco meses en el estado de Coahuila y hoy pide ayuda para retornar a la capital del Huila donde la espera su familia y su hija de 7 años de edad.
Desde el pasado 22 de julio se complicó aún más la situación de la joven de 24 años de edad en este país, unos fuertes e insoportables dolores de cabeza que no logró calmar con medicamentos, la obligaron a buscar atención médica.
“Fui a la Cruz Roja, porque no tengo seguro médico entonces me hicieron un tac cerebral y se lo entregué a un neurólogo que tuve que pagar particular, salió que tenía líquido como si hubiera manchas de sangre debido a golpes pasados, eso fue lo que entendí. Yo le acepté al doctor que hace unos años atrás un hombre me pegó fuerte y debió quedar las secuelas. Me dijo que podía ser una cefalea en racimos, me pusieron oxígeno y se me calmó mientras tomaba el oxígeno y un medicamento vía intravenosa, después que salí del hospital siguió el dolor él me mandó unos medicamentos que son demasiado fuertes, pero siguieron los dolores entonces yo me comuniqué con él y le expliqué que seguía el dolor y pues me dice que no era normal que toca hacer otros estudios”, comentó.
Sus dolores siguen y cada día aumentan, y no puede seguir pagando de manera particular las consultas y medicamentos, por esto le urge regresar a Colombia para ser atendida adecuadamente, teme porque su salud empeore lejos de su casa.
“Debido a tanto medicamento que he tomado para el dolor ya se está ocasionando una gastritis. Acá me toca pagar por todo y ya no tengo dinero, el neurólogo me envió otros exámenes y me diagnóstico que tengo inflamación en las arterias de la cabeza, que están haciendo que pierda mi visión. Me entregó una nueva orden y me dijo que tenía probablemente una arteritis de la temporal y me envió un tratamiento muy costoso que no puedo pagar. Necesito una biopsia en la arteria temporal urgente. Si yo no tomo un tratamiento pronto puedo quedar ciega”, afirmó.
Ha buscado ayuda en todas partes, pero hasta ahora no ha logrado viajar en uno de los vuelos humanitarios que ha organizado el Gobierno Nacional.
“Ya solicité la ayuda a la Cancillería, me dicen que ya estoy en la lista, pero que hay que esperar, ya llevo más de 2 meses esperando les expuse mi caso, todo lo que estoy pasando y me dejaron en visto. Es una urgencia poder viajar a mi país para poder empezar un tratamiento con el neurólogo”, finalizó la joven madre que espera reencontrarse pronto con su hija.
