Eduardo Gutiérrez Arias
Desde su creación en el año de 1905, el Huila fue un bastión del Partido Conservador y en general de la derecha más radical del país. Eso cambió en las pasadas elecciones parlamentarias. Mientras hace cuatros años (2018) los partidos de la derecha tradicional (Conservador, Liberal, Cambio Radical y Centro Democrático), se regocijaban con su triunfo electoral habiendo elegido cada uno un Senador y un Representante a la Cámara para un total de 8 parlamentarios huilenses quienes se han caracterizado por su apoyo obsecuente e incondicional a todas las iniciativa neoliberales y reaccionarias salidas de la presidencia, hoy los resultados son bastante diferentes y todos ellos lamentan su fracaso electoral. El Centro Democrático y el Partido Conservador perdieron su Senador y su Representante a la Cámara a nivel regional, el Partido Liberal sólo revalidó su Representante a la Cámara pero no eligió Senador por el Huila y al Partido Cambio Radical se le quemó su principal líder y aspirante al Senado Carlos Julio González aunque en la Cámara logró elegir dos representantes en una campaña estigmatizada por las denuncias y acusaciones de delitos contra el libre ejercicio del sufragio. El quinto partido del actual régimen, que no ha elegido ni Senador ni Representante a la Cámara desde el 2018 por el Huila, es el Partido de la U.
En una campaña electoral que como ya se dijo, estuvo caracterizada por la compra de votos, el constreñimiento al elector y otros delitos contra el libre sufragio, es relevante y significativo que un partido nuevo como el Pacto Histórico, haya sido el más votado en las consultas interpartidistas con algo más de 120.000 votos y se convierta en la segunda fuerza política en las listas de Cámara con 68.878 votos, eligiendo a la profesora y exconcejal de Neiva, Leyla Rincón, como su Representante a la Cámara con 34.575 votos. Los otros 34.303 corresponden a los votos depositados por los otros dos candidatos Orlando Beltrán y Germán Calderón y quienes sólo votaron por el Partido pero no lo hicieron por ninguno de sus candidatos. De esta manera se superó ampliamente el umbral y el progresismo democrático pudo elegir autónomamente una congresista huilense. El único antecedente de la izquierda huilense con presencia en el Congreso fue el periodo de 1986 a 1990 cuando Convergencia Liberal dirigida por Guillermo Plazas, pacto una alianza con la Unión Patriótica, siendo Alberto Rojas suplente de Plazas y Hernán Rojas de Julio Enrique Ortiz. Los neivanos premiaron a la profesora Leyla con algo más de 21,000 votos como justo reconocimiento a su lucha contra la corrupción administrativa y en defensa del medio ambiente y como una forma de exaltar la honradez, el espíritu de trabajo y la sencillez del pueblo opita.