Como pólvora se están regando por todo el país las imágenes de Alcaldes y funcionarios públicos que protagonizan fiestas, parrandas, verbenas y francachelas en plena pandemia y cuando en el país está vigente el aislamiento obligatorio preventivo decretado por el Gobierno Nacional para contener la propagación del coronavirus.
El Huila no ha escapado a esa racha de escándalos en estos últimos días. Cuando aún se hablaba del comandante de Policía del municipio de Baraya por participar en una aparente fiesta, la mirada escrutadora está ahora sobre el alcalde del municipio de Guadalupe, Charles Barrera Zúñiga, quien convirtió un paseo en bicicleta en una parranda vallenata. O al menos, eso es lo que muestran los videos que desde el fin de semana pasado han circulado por redes sociales.
En las imágenes, se ve claramente a un mandatario bailando animadamente al ritmo de la música del fallecido cantante Martín Elías, mientras varias personas ingieren licor y lo siguen en sus pasos. En Guadalupe, han confirmado que algunos de los que aparecen en el ruidoso video son funcionarios de la Administración Municipal.
En época de pandemia, con un virus sumamente contagioso como el covid-19 y una norma restrictiva, esta clase de parrandas y francachelas no sólo están prohibidas sino que se constituyen en un grave riesgo para la comunidad.
Los Alcaldes y servidores públicos son los primeros llamados en dar buen ejemplo en sus municipios. No es posible que un mandatario le pida a sus gobernados que se protejan del coronavirus y que cumplan medidas como el distanciamiento social, cuando, de puertas para adentro, se encargan de promover excesos.
Ojalá este tipo de episodios indecorosos, banales y poco serios protagonizados por mandatarios y funcionarios en plena pandemia no terminen provocando muertos y enfermos.
“No es posible que un mandatario le pida a sus gobernados que se protejan del coronavirus y que cumplan medidas como el distanciamiento social, cuando, de puertas para adentro, se encargan de promover excesos”