El departamento está preparando una reorganización y reestructuración de sus redes de salud que traería consigo la unificación de hospitales de municipios cercanos y limitaría algunos servicios, en otros. El objetivo es superar el alto riesgo de no ser financieramente sostenibles.
Caterin Manchola
huila@lanacion.com.co
La Secretaría de Salud del Huila se encuentra ultimando detalles del Programa Territorial de Reorganización, Rediseño y Modernización de Redes de las Empresas Sociales del Estado – ESE, en Huila; la propuesta sería el ‘salvavidas’ financiero de los hospitales de Villavieja, Tesalia, Yaguará, Íquira y El Pital.
La vocera de la entidad, Claudia Helena Ruiz Jaramillo, es consciente de que la solución en un principio “podría generar pánico”, sin embargo aseguró que el objetivo principal es “ser eficientes con lo que tenemos”.
En ese sentido, explicó que lo planteado abarca la unificación de centros médicos entre municipios cercanos, limitando parcialmente algunos servicios, en unos, y ofreciendo a cabalidad de la prestación, en otros; anotó que el traslado de los pacientes a localidades vecinas reduciría las hospitalizaciones, procesos que generan altos costos para las ESE.
Así mismo, se estudia la posibilidad de integrar servicios, reducir el personal médico y administrativo, como también apostarle a la telemedicina, esas serían unas de las alternativas para lograr la recuperación económica.
Para la funcionaria, las asistencias de urgencias y hospitalizaciones están ocasionando pérdidas, por ende lo mejor es dejar una consulta prioritaria. “Un médico para que atienda consultas y, si es necesario, efectúe el proceso de remisión del paciente, tratar de no tener tanto personal médico de noche, porque eso representa más funcionarios de enfermería y también de laboratorio”, detalló.
De ante mano la Secretaria también sostuvo que la propuesta es a modo de prevención. “Nosotros no podemos cerrar hospitales ni restringir servicios, eso lo hace la Superintendencia de Salud, pero en el momento en que lo hagan les quitarán la administración, que es precisamente lo que queremos evitar, porque cuando ocurra nos veríamos en la misma situación que Altamira”.
Sin recursos
Lo anterior es a modo de plan choque, debido a que en Colombia los hospitales públicos atraviesan desde hace años una difícil realidad que no les permite ser financieramente viables y eso se debe a varios factores.
Según expuso la Secretaria de Salud, las Empresas Sociales del Estado (ESE), de Villavieja, Tesalia, Yaguará, Íquira y El Pital, actualmente están sobrellevando planes de saneamiento fiscal y financiero, del que podrían salir bien libradas, pero solo hasta el momento en que deban enfrentar una nueva demanda, advirtió.
Explicó que existe una debilidad en el sistema donde el recurso de las ESE es limitado. Y que a nivel nacional, el monto girado a los municipios se está reduciendo, “es decir que el manejo financiero tiene que ser mucho más responsable”, resaltó.
Además, expertos indican que a nivel general el hospital público se encuentra muchas veces solo y tiene grandes desequilibrios entre lo que factura, le reconocen y recauda; así mismo, padece de problemas muy serios de corrupción y de captura clientelista.
Otra de las razones que cobra mayor relevancia en el caso del Huila, tiene que ver con el bajo porcentaje de población atendida y las cuantiosas demandas que afrontan las ESE.
Las localidades
Claro ejemplo de ello es Villavieja, cuyo dictamen es que “no ha levantado cabeza, si se deja en este momento como está, muy seguramente lo van a descertificar como lo está Altamira, que ya no tiene ni siquiera la administración”, continuó advirtiendo la Secretaria.
Sin embargo, en los municipios no todos apoyan la propuesta de limitar la atención. La gerente de la ESE Hospital del Perpetuo Socorro de Villavieja, Mayerly Patricia Fierro Murcia, manifestó estar en desacuerdo con que se reduzcan los servicios y argumentó que desde que está en el cargo ha trabajado por hacer que la institución sea más eficiente.
No obstante, actualmente ocho procesos de demanda cursan en contra de la entidad y la deuda asciende a $450 millones.
Caso similar se registra en Tesalia, que fue categorizada en riesgo presupuestal y financiero medio, y su plan de saneamiento va hasta el próximo año. “El inconveniente es que no hemos podido cumplir con el plan de saneamiento fiscal y financiero por una deuda que tenemos con Infihuila, ese es el único crédito que falta por pagar. Por lo demás, ya hemos salido de la mayoría de los pasivos, hemos pagado más de $600 millones”. La deuda actual es de $250 millones.
Por su parte, la ESE Laura Perdomo de García en Yaguará adeuda más de $300 millones, y aunque no se pudo establecer el monto real, la gerente de la entidad, María de los Ángeles Villegas, dijo que están a la espera de una inyección de recursos por parte de la Gobernación del Huila. Y del fallo de algunas demandas.
Para El Pital el escenario también es complejo. La ESE Centro de Salud San Juan de Dios fue catalogada en riesgo alto según la última categorización del riesgo de las Empresas Sociales del Estado del nivel territorial para la vigencia 2019, entregada por el Ministerio de Salud.
Según el gerente de la entidad, Roldan Montealegre, fueron dos demandas que superaban los $900 millones las que provocaron la desestabilización.
La ESE Hospital María Auxiliadora de Íquira, fue categorizada en riesgo medio el año pasado y desde entonces también afronta un plan saneamiento fiscal y financiero, al igual que las otras localidades que durante el proceso reciben recursos económicos por parte de la Gobernación del Huila, del municipio y en el que las mismas ESE deben hacer un esfuerzo presupuestal.
Adicionalmente se conoció que Paicol atraviesa por una condición difícil, pero no tiene plan de saneamiento puesto que su riesgo, según lo reportado en el 2018, era bajo, se espera que en el próximo reporte que entregará en Ministerio de Salud a finales del presente mes, este municipio tenga la posibilidad de comenzar con un plan.
Dolorosa experiencia
En Huila, ya se vive una difícil experiencia a casusa de la pérdida de un hospital. Por las deudas, que fueron a raíz de malos manejos de dinero y demandas, la ESE hospital de Altamira desde hace años no puede prestar los servicios de salud y en consecuencia la ESE Hospital Nuestra Señora de Guadalupe se hizo cargo de los pacientes.
El alcalde de la localidad, Efraín Calderón Londoño, expresó que esta es una situación que genera inconformidad e incomodidad para la ciudadanía. “Aquí solo se ofrece consulta externa durante el día, si las personas tienen una urgencia tienen que desplazarse hacia Guadalupe”, dijo.
Precisamente, Juan Carlos Correa, residente de la vereda La Guaira, ha tenido que padecer por la falta de un centro médico. “Es muy difícil, a nosotros nos toca pedir un expreso o algo para ir a la parte que nos quede más cerca, desde el pueblo a Guadalupe hay 15 minutos, a Timaná 20 minutos y a Garzón media hora. Nos ha tocado salir a media noche a buscar en qué nos vamos”.
En los próximos días se estaría presentando el documento de cómo deben reestructurarse los hospitales. Este sería un documento preliminar que pasaría por un proceso de socialización y estaría vigilado por parte del Ministerio de Salud.