Con la presencia de la vicepresidente de la República, Marta Lucía Ramírez, se hizo esta semana en Neiva el lanzamiento del proyecto de desarrollo rural ‘El Efecto Cacao’, que busca promover desarrollo en los territorios afectados por la violencia, a través de inversión privada.
Con esta iniciativa, producto de una alianza entre USAID/Colombia, Luker Chocolate, Fundación Luker, Enel-Emgesa, Fundación Saldarriaga Concha y Eafit y que demandará una inversión superior a los 30 millones de dólares, la producción cacaotera del centro del Huila se beneficiará durante los próximos 30 años. El objetivo es intervenir más de 750 hectáreas de pequeños productores en los municipios de El Agrado, Garzón, Gigante, Pital, Campoalegre y Rivera, sumadas a las 120 hectáreas entregadas por Enel-Emgesa en el municipio de El Agrado, para el desarrollo del cultivo ancla.
Por donde se le mire, el proyecto ‘El Efecto Cacao’ tiene un gran calado social, pues involucra a más de 3 mil familias. Al referirse a la iniciativa, la Vicepresidente expresó: “Quiero decirles que hay que seguir generando condiciones para que el cacao crezca en el Huila, porque la fertilidad de estas tierras sean realmente las que nos dé la posibilidad de seguir desarrollando un cacao de excelente calidad”. Y agregó: “Este es un Gobierno que se la ha jugado a fondo por el desarrollo rural y el sector empresarial, dos sectores que van de la mano”.
En efecto, no se deben escatimar esfuerzos a la hora de promover el desarrollo rural. A nuestros campesinos hay que incentivarles su vocación empresarial.
Ojalá el Gobierno Nacional destinara directamente muchos más recursos para fortalecer la productividad agropecuaria en regiones como el Huila. Es una deuda social que tiene el Estado central con el campesinado este departamento que sufrió los rigores del conflicto armado de las últimas décadas.
“Ojalá el Gobierno Nacional destinara directamente muchos más recursos para fortalecer la productividad agropecuaria en regiones como el Huila”