La Nación
El trabajo desinteresado da frutos 1 29 marzo, 2024
NEIVA

El trabajo desinteresado da frutos

Tres décadas trabajando a favor de las comunidades han convertido a Dubia Isabel Tovar Hernández en una verdadera líder social. Su lucha desinteresada le ha traído grandes satisfacciones.

 

Carolina Argüello Cruz

comunidad@lanacion.com.co

 

Ver a un niño o a una familia feliz, así como poder ayudar a los necesitados, son de las más grandes satisfacciones que le ha dado la vida a Dubia Isabel Tovar Hernández. Esta líder social se ha dedicado durante 30 años a defender los intereses y suplir las necesidades de los habitantes del sector de la Media Luna en el barrio San Bernardo, comuna 10 de Neiva. Sector fuertemente golpeado por la delincuencia, la drogadicción, la pobreza y las desigualdades.

A este lugar llegó y se convirtió en fundadora ya que su familia fue la tercera en ocupar este terreno antes inhabitable y lleno de peligros.

“Soy líder de la comunidad de la Media Luna, líder del Comité Cívico por la Defensa del Territorio y desde ese rol hemos trabajado siempre por sacar a nuestra comunidad adelante, de presentar proyectos que la beneficien y de estar pendiente de todas las ayudas que puedan tener tanto niños como adultos”.

Dubia es reconocida en todo ese sector como una mujer valiente que no se ha dejado doblar pese a los tropiezos, al igual que desavenencias que le han llegado por querer hacer parte de soluciones. Pero sus ganas de ayudar, su noble corazón y su fuerza le han permitido dar cada paso con mayor firmeza para no caerse.

Su familia ha estado siempre en medio de sus dificultades que aunque han sido pasajeras, han marcado huella fortaleciendo su causa y su lucha.

“El trabajo ha sido muy fortificante para mí, porque es algo que hago con el corazón y del que me siento orgullosa. Sin embargo, es un trabajo que es bastante duro porque no encontramos eco para que nos apoyen, aporten o se solucionen las necesidades de las comunidades. Nos toca trabajar con las uñas”.

Las necesidades que también son suyas

Para Dubia es claro que no todas las personas poseen las mismas necesidades, algunos tienen más que otros, pero para ella todas son iguales. Pues el sentir de su comunidad, también le afecta o la enriquece.

La comuna 10 ha sido su casa, su terreno, su lucha y el lugar donde ha librado una que otra batalla. El hambre, las vías y la ilegalidad son las más fuertes de enfrentar. Ella, una mujer de más de 50 años, no se deja intimidar, aunque sea consciente de que ‘no hay enemigo pequeño’.

“Para nadie es un secreto que ser líder es bastante difícil en nuestro país y no solamente acá, porque vemos que son muchos los que están asesinando en todo el mundo, eso pasa cuando hay el verdadero liderazgo. Es bastante preocupante y nocivo para nuestras familias porque vemos que ellos hacen parte del peligro que nosotros tenemos y al que nos vemos expuestos cada día por representar a las comunidades y ser los verdaderos líderes que queremos ser”.

Desde que vivía en El Guamo, Tolima, su tierra natal, ya comenzaba ha demostrar sus dotes de liderazgo y de la labor desinteresada por ayudar a los demás.

“De verdad que es muy bonita la labor social cuando se realiza de corazón, más cuando uno se da cuenta de las necesidades que hay tan grandes, la ineficiencia y la falta de apoyos, ahí es cuando uno siente ese liderazgo y la necesidad de comprometerse con las personas que necesitan de un apoyo, cree uno que debe tomar la bandera y decir que representa a una comunidad”.

Hoy en el Día Internacional de la Mujer, Dubia deja un mensaje claro que involucra a toda la sociedad.

“Que seamos unidos, mujeres, hombres y todos. No nos dejemos dividir porque si eso pasa, el hombre no es nada sin la mujer y la mujer no es nada sin el hombre. Todos somos una sola familia. Invitarlos en este día especial a compartir con todo el que lo necesita, pues todos somos seres humanos con derechos y cualidades que nos engrandecen”.