Hernando Ruiz hace para LA NACIÓN un balance de lo que fue su paso por la gerencia de la Electrificadora del Huila. Destaca las utilidades que generó la compañía en los últimos cuatro años. Sugiere que su sucesor tenga “un conocimiento muy preciso de la situación regional”.
Jesús Antonio Rojas Serrano
El economista Hernando Ruiz López acaba de dejar la gerencia de la Electrificadora del Huila. Estuvo cuatro años y cuatro meses. En entrevista con LA NACIÓN, Ruiz hace no sólo un balance sino que habla de la polémica alrededor del contrato de los $16 mil millones antes de irse y de quién será su sucesor.
¿Qué significó su paso como gerente de la Electrificadora del Huila?
Durante estos cuatro años y cuatro meses que estuvimos al frente de Electrohuila, se consiguieron muchas cosas. La compañía mantuvo unos niveles de generación de utilidades y de aportes a la comunidad, excepcionales frente al comportamiento histórico de la compañía. Logramos iniciar un proceso firme de inclusión de la empresa en la política actual del país en materia de aprovechamiento de fuentes de energías con recursos renovables no convencionales, al punto que restablecimos el funcionamiento de las pequeñas centrales hidroeléctricas del occidente y centro del departamento. Dejamos iniciado el proceso de la construcción del primer parque solar que tendrá el Huila; eso ya está listo. Otra cosa importante: el mantenimiento de unos resultados positivos para los inversionistas, que en su forma mayoritaria es el Gobierno Nacional con un 83%, pero que también la región en cabeza de la Gobernación y las Alcaldías tienen un 17%; de tal manera que durante estos cuatro años los recursos que le aportamos al departamento y a los 30 municipios que son socios de la Electrificadora superan los $40 mil millones.
¿Cómo será el parque solar de Electrohuila?
Desde que llegamos empezamos a trabajar en la posibilidad de que Electrohuila tuviera su propia granja solar. Pensamos inicialmente en una granja de 20 megavatios, pero después las circunstancias nos forzaron a bajarle a su tamaño. Hace un año, logramos conformar un proyecto para un parque solar de 10 megavatios, que generará 2.5 megas de manera permanente y serviría para abastecer a un municipio mediano del departamento. Es una forma de introducirnos en el aprovechamiento de energías renovables no convencionales. En enero quedó aprobado. En su sesión de febrero, la junta directiva aplazó el proyecto; volvió y lo aplazó en marzo. Ahí quedó hasta el pasado mes de agosto, cuando insistimos. Tuvimos la fortuna que la junta entendió la importancia del proyecto y lo pusimos a caminar.
Financieramente, ¿Cómo quedó Electrohuila?
Durante los cuatro años de mi administración, Electrohuila generó más de $200 mil millones de utilidades netas para sus propietarios. Hay que decir que toda esa plata no se la lleva la Nación; buena parte, de alguna manera, revierte al departamento vía aprobación de recursos para el desarrollo de proyectos de expansión y de mejoramiento de calidad del servicio de energía. Nosotros logramos que la junta directiva fuera generosa en el sentido de aprobar proyectos de gran magnitud como la rehabilitación de las pequeñas centrales hidro-eléctricas que estaban deterioradas a mi llegada, la financiación completa de la línea de transmisión entre Altamira y La Plata, entre otros.
Los lectores no me perdonan si no le pregunto por la reciente polémica alrededor del contrato que por $16 mil millones otorgó a una empresa foránea para el servicio de transporte, ¿Qué pasó?
El transporte especial que demanda Electrohuila es una necesidad estratégica y no puede quedar supeditado a una voluntad de algunas personas de tener un carrito alquilado a la Electrificadora, que fue lo que yo percibí de la queja que hubo. La licitación que se sacó fue resultado de tres sesiones completas que tuvimos con la junta directiva y en las que se determinó cuáles eran las condiciones para esa contratación. Nosotros presentamos la opción de contratar vehículos usados de no más de cuatro años, pero la junta directiva pidió que la contratación fuera de vehículos nuevos. Y esto no es raro; Electrohuila siempre ha contratado vehículos nuevos. Todas las condiciones de exigencia financiera y capacidad operativa correspondieron a sesudos análisis que la administración hizo con la junta directiva, en la que están también representantes de la región. La propia junta le pidió a la Contraloría un acompañamiento especial y se hizo. Lo que yo creo entender de esta situación es que se quiso forzar a Electrohuila a que hiciera una contratación acorde a las necesidades económicas de la región producto de la pandemia.
Con su salida de la Electrificadora del Huila, la junta directiva se apresta a elegir en las próximas horas a su sucesor, ¿Quién debe ser el nuevo gerente?
La principal condición que debe tener esa persona es un conocimiento muy preciso de la situación regional, de las exigencias de los usuarios del departamento, de las condiciones socioeconómicas de la región, de la responsabilidad que tiene Electrohuila como empresa insignia de la región. Electrohuila es de los pocos operadores regionales que todavía gozan del respaldo de sus usuarios.
¿Ya ha escuchado algunos nombres de quién será su sucesor?
Aquí entre nos: yo sé quién será, pero hay algún interés para que todavía no se sepa.
Suenan nombres como los del ingeniero electricista Luis Ernesto Luna Ramírez, María Alexandra Toro Charry, Lina Guarnizo, Cielo Ortíz, entre otros, ¿Será alguno de ellos?
Aquí me acuerdo cuando en la pasada campaña a la Presidencia de la República decían que iba a ganar el que dijera Uribe, aquí va a ganar el que diga…
¿El senador Ernesto Macías?
Ustedes los periodistas viven mejor informados.
¿A qué se va a dedicar ahora?
Estoy en mis cosas privadas y descansando. La verdad es que en los cuatro años y cuatro meses que estuve en la compañía no tuve un solo día de vacaciones. Necesito un descanso, dedicarme a mi casa, mi familia y mis amigos.