Según los líderes de los corregimientos San Luis, Aipecito y Chapinero, en sus comunidades empiezan a escasear los víveres, el número de enfermos aumenta y ante la falta de maquinaria suficiente en la zona, los pobladores han tenido que abrir paso a pica y pala en medio de los derrumbes. Según los líderes de los corregimientos San Luis, Aipecito y Chapinero, en sus comunidades empiezan a escasear los víveres, el número de enfermos aumenta y ante la falta de maquinaria suficiente en la zona, los pobladores han tenido que abrir paso a pica y pala en medio de los derrumbes. Los representantes campesinos pidieron rapidez a las autoridades. MARIO PORTILLO LA NACIÓN, NEIVA Luego de 10 días de registrados los estragos en los corregimientos de San Luis y Aipecito, en la zona rural de Neiva, las comunidades siguen aisladas por los derrumbes ocasionados. A pesar de la gestión que adelantan los líderes de los corregimientos en Neiva, las condiciones climáticas y la falta de los censos totales de las afectaciones han retrasado las acciones en el sector. Los líderes advirtieron desabastecimiento y enfermos en la zona.
En ese sentido, lo expresado por los pobladores del sector que llegan a Neiva para sumarse al grupo de líderes que gestionan en la ciudad ayuda para sus comunidades, relaciona una situación que con el paso de los días se agrava. “En estos momentos los corregimientos de San Luis, Aipecito y Chapinero se encuentran totalmente aislados. Estamos bajando a Neiva, sorteando cerca de 60 derrumbes durante el recorrido. Ahora mismo San Luis no tiene ningún tipo de abastecimiento, no tenemos comida, los pocos víveres que existían en las tiendas ya se agotaron, no hay una gota de arroz”. “Debido a los taponamientos hemos sacado pacientes como sea, se están sacando a hamaca hasta donde un vehículo puede recoger a la gente, un recorrido que se demora más o menos tres horas para llegar a esos puntos. Los enfermos los sacamos hasta la vereda Piravante, corregimiento de Palermo y ahí vienen a recogerlos en moto; sobretodo hemos sacado mujeres embarazadas”, expresó Mario Guzmán, vicepresidente de Asojuntas, corregimiento de San Luis. Trabajo en comunidad Guzmán, que arribó ayer a Neiva, comentó que ante la imposibilidad de que la maquinaria suficiente llegue hasta San Luis para remover los derrumbes, la comunidad ha tenido que actuar por su cuenta para habilitar algunos tramos de vías afectados por deslizamientos. “Afortunadamente ha existido la solidaridad de todas las comunidades. Por ejemplo hoy (ayer) entre la comunidad de San Luis y tres veredas aledañas habían alrededor de unas 300 personas tratando de habilitar paso, para ver si salimos por la vereda La Libertad. La gente está abriendo paso a pica y pala. En estos momentos hasta San Luis no ha llegado maquinaria. Puedo decir que la única máquina que vi en mi desplazamiento hacia Neiva, fue una máquina en la vereda Piravante, pero estaba varada”. “La comunidad logró habilitar pasos como la Vuelta de la Lupa, cerca de las minas de mármol y un paso por la vereda La Libertad, para ver si habilitamos un acceso por una vía que sabemos está buena, que es Libertad-Vergel- La Lupa, que nos daría un acceso para entrar algo de comida”, manifestó el líder. Sin servicios De la misma forma, Mario Guzmán indicó que en el caso de San Luis no se cuenta con los servicios públicos en su totalidad. “Las afectaciones más grandes son en viviendas y cultivos, pero no podemos dejar de mencionar la destrucción de los acueductos, por ejemplo el de San Luis, que surte a cerca de 300 a 400 personas. En este momento estamos sin agua, por parte de la comunidad se lograron unir unas mangueras y estamos surtiendo los tanques del acueducto y con eso estamos tratando de darle el servicio al corregimiento”. “Otra cosa es que como no hemos tenido energía, eso dificulta la comunicación con Neiva, sumado a que no tenemos señal celular. La energía se restableció ayer entre la comunidad y personal de Electrohuila, el problema es que no sabemos si con las lluvias que afectan todavía al sector, eso se venga al piso y quedemos de nuevo sin energía”, agregó el representante campesino. Censos Según lo expresado por los líderes del sector, los censos totales de las afectaciones se terminaron el fin de semana anterior, gracias al trabajo complementario adelantado por los corregidores y el cual se sumó a los elaborados por las comisiones de socorro del Municipio, que visitaron la zona en los primeros días de la tragedia. “Los censos los han estado haciendo los corregidores y el personal de la Oficina de Desastres que estuvieron en la zona, ya se entregaron al DRI y ahora sólo esperamos que sobre ellos empiecen a tomar las acciones ágiles y rápidas, que en todas las áreas lleven soluciones a nuestro sector”, mencionó Guzmán. De parte de los líderes que adelantan las gestiones en Neiva y que ya completan 10 días en esa tarea, también se expresaron las expectativas en adelante. “Nos dicen que con base en esos censos, es que podrán establecer las acciones puntuales y dar agilidad a los distintos procesos por medio de la firma del decreto de calamidad pública que hicieron. Es decir, con esas evidencias empezarán a trabajar en todos los frentes”. “Esperamos que sea una cosa ágil, porque ya llevamos casi dos semanas en esta gestión y entendemos que esto tiene su trámite, pero la gente arriba necesita soluciones y ayudas. Es que no sólo son las vías, hay puentes, acueductos, escuelas, todas las pérdidas en cultivos, viviendas, salud, frente a lo cual necesitamos claridad”, comentó Diovany Perdomo, presidenta de Asojuntas San Luis. Respuesta en vías Frente a la situación en lo concerniente a vías, el responsable de esa cartera municipal Carlos Gómez, indicó el trabajo adelantado y las expectativas de despeje de los taponamientos para el próximo fin de semana. “Tan pronto se dio la emergencia, con nuestra maquinaria y la ayuda del Municipio de Palermo y la Gobernación alcanzamos a trabajar entre Palermo, Guácimo y Aleluya, y allí se removieron de 16 a 17 derrumbes. Estando en Guácimo nos reforzó una retorcargadora de oruga enviada por la Gobernación en convenio con unos sectores mineros de Palermo”. “Con esta maquinaria llegamos al punto de Guácimo, ahí más arriba hay un sector que se llama Aleluya, ahí hay una Y, una vía sale para El Vergel y La Lupa, y la otra sale para el lado de Piravante, Piñuelo, Corozal y San Luis. Esa ruta presenta unos seis derrumbes grandísimos y los cuales aparte del peligro que significan, requieren más maquinaria”. “Por el otro lado, Vergel y La Lupa, donde está trabajando la Gobernación y el Municipio de Palermo, hay un punto que se llama La Cima, que comunicaría San Luis, Corozal, Libertad Alto y Libertad Bajo, por esta vía sabemos que hay tránsito restringido porque existen piedras muy grandes que hay que reventar y mañana (hoy) estaremos enviando otra retrocargadora, para que nos garantice la salida por la ruta de San Luis, Corozal, Baja Libertad, Libertad, La Cima, La Lupa, Vergel, Aleluya; se incrementa el recorrido en una hora y media pero tendríamos salida por ahí”. “La retorcargadora que tendríamos ahí, luego de remover lo que quede de las piedras, se bajaría de Corozal a Piñuelos y a Piravante y se va a encontrar con la otra para trabajar en ambos sentidos. La idea es trabajar fuerte para el fin de semana estar llegando a San Luis”. “La emergencia en el tema vial no está superada, pero esperamos sobre el fin de semana estar llegando a San Luis y estando allí podemos garantizar un verdadero diagnóstico y planear una intervención efectiva para aprovechar los recursos y la maquinaria que nos ofrecen a nivel nacional”. ‘No habrá cese de clases’ En lo referente al tema de un posible cese de clases en las instituciones educativas del sector, el secretario de Educación Faiver Hoyos descartó esa posibilidad luego de reunirse con los líderes de la zona. “Luego de una reunión con representantes de la comunidad, rectores y corregidores, hemos resuelto que cada institución educativa tiene una particularidad y se analizaba la posibilidad de hacer un adelanto en las vacaciones, pero eso ha quedado totalmente descartado”. “Como sólo se ha afectado una semana institucional que le corresponde a los maestros y que se trabaja sin estudiantes, entonces esa semana queda como institucional y los rectores a partir de la fecha entrarán a resolver su problema con su comunidad, con su consejo directivo, dentro de su mismo sector. Entendemos que son casos diferentes y por eso hemos dado un tiempo de una semana para que las vías estén prácticamente funcionando”. “Hemos llegado al planteamiento de que inician las clases y la recuperación de los días que no se han tenido, pues la idea es que una hora diaria se estaría sumando a ese calendario académico”.