La empresa costeño-santandereana rebautizada como Corporación Social Buen Corazón, fue escogida a dedo por la Alcaldía de Neiva para distribuir 38.091 mercados escolares en plenas vacaciones estudiantiles. La nueva operadora nació con otro nombre de la corporación llena de escándalos y vínculos políticos.
RICARDO AREIZA
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Como si no existieran comerciantes y productores locales, la Alcaldía de Neiva, le adjudicó a dedo a una empresa santandereana la última entrega del Programa de Alimentación Escolar (PAE).
El nuevo contrato fue adjudicado sin licitación pública a la Corporación Social Buen Corazón, con profundos vínculos políticos y empresariales con la costa caribe y los dos santanderes donde han consolidado su poderío.
Curiosamente, la adjudicación se hizo, extemporáneamente, cuando los estudiantes de las instituciones públicas, salieron a vacaciones, al terminar el calendario académico del presente año lectivo.
La decisión, como lo había anticipado LA NACIÓN, fue adoptada en forma directa el jueves pasado para entregar mercados y no raciones escolares.
Aunque la ley de compras públicas establece la obligación de las entidades estatales de adquirir localmente alimentos comprados a pequeños productores, la administración municipal, sin una explicación coherente decidió otorgarle la operación a una empresa foránea, como si en Neiva no existieran comerciantes que pudieran atender la prestación de este servicio.
Al otorgar el contrato en plenas vacaciones escolares, se incumpliría de entrada el objetivo esencial del programa, el acceso con permanencia al sistema educativo a través del complemento alimenticio para presionar el retorno a la presencialidad.
Valor del contrato
Inicialmente el contrato tenía un costo de 6.321,33 millones de pesos, asignados por el Ministerio de Educación para facilitar el retorno de la presencialidad de los estudiantes de los colegios públicos.
Sin embargo, al cruzarse con las vacaciones y la terminación del periodo académico, solo se contrató una parte por valor de 2.142 millones de pesos para los estudiantes priorizados de las 196 instituciones públicas de Neiva.
El saldo restante, 4.179 millones de pesos, se contratarán el próximo año cuando comience el nuevo calendario escolar, explicó el secretario de Educación, José Paul Azuero Bernal.
En total se contrató a dedo, 38.091 mercados para los estudiantes que estuvieron matriculados y registrados en el Sistema Integrado de Matrícula (Simat).
El contrato no tendrá interventoría. “Esos recursos nos los ahorraremos porque nosotros vamos a realizar directamente la supervisión del contrato”, explicó Azuero Bernal.
El funcionario, quien asumió el cargo el 2 de noviembre último, le tocó darle continuidad a un proceso en marcha iniciado por su antecesor Giovanni Córdoba, ahora asesor del alcalde.
“La licitación fue declarada desierta. La medida fue confirmad al resolverse la reposición que presentó uno de los oferentes. Así que ahora, atendiendo las instrucciones de la administración y la urgencia manifiesta se procedió a contratar directamente el suministro de los mercados”, confirmó Azuero.
“La idea es que la nueva empresa inicie el proceso a partir de la fecha para iniciar la entrega del apoyo alimentario entre el 16 y el 26 de noviembre, que será la última del año”, subrayó.
El proceso fue socializado el viernes con las veedurías ciudadanas. Sorpresivamente los veedores guardaron silencio.
Abortada licitación
La licitación pública, convocada el 26 de agosto pasado (Resolución No. 1678 de 2021) fue declarada desierta después de aplazarse en ocho oportunidades la audiencia de adjudicación.
Aunque varios oferentes consideraban que sus propuestas eran superiores, el favoritismo estaba en dos empresas: Strategy Co. SAS, de Norte de Santander, representado por Manuel Fernando León Castillo y la Unión Temporal Nutrición Neiva representada por Carlos Andrés Farfán Álvarez, directivo suplente de la Cámara de Comercio de Neiva.
No obstante, al revelarse los resultados de la evaluación final, la primera opción la obtuvo la Unión Temporal Nutriendo Sueños Neiva, representada por Robinson Cely Cely. La empresa bogotana obtuvo una calificación de 99,559.
El segundo lugar lo ocupó Strategy Co. SAS de Cúcuta con 97,46 puntos. La tercera fue Lácteos Appenzell Neiva, radicada en Bogotá con 97,3 puntos. La cuarta Avoss con 96,825 puntos y el quinto lugar fue para la UT Nutrición Neiva con 95,50 puntos.
Las dos últimas fueron Unidos PAE Neiva con 86,785 puntos y Nutriendo el Futuro de Neiva con 86,255 puntos.
Los resultados de la evaluación técnica, jurídica y financiera fueron anunciados el 6 de octubre pasado, cambiaron el rumbo de la convocatoria pública.
Objeciones
Ante las múltiples objeciones la audiencia de adjudicación se aplazó por sexta vez y finalmente se declaró desierta, supuestamente, por “algunas ambigüedades y la dualidad de criterios en la interpretación en la tabla de puntuación que permitieron una calificación objetiva y precisa”.
“Justo en el momento en que la administración municipal debía hacer la adjudicación del contrato el día 7 de octubre de 2021, después de la lectura del informe final de evaluación, se tomó la cuestionable decisión de suspender la audiencia de adjudicación para el día 11 de octubre de 2021 sin mayor justificación por parte de la secretaria de educación de Neiva”, afirmó Cely Cely vocero de la empresa con más puntaje.
“La audiencia de adjudicación fue suspendida en tres ocasiones más argumentando la necesidad de tener más tiempo para soportar su decisión final, “sin ningún argumento de hecho y de derecho que soporte las suspensiones”, anotó el proponente.
La decisión la tomó el entonces secretario de Educación, Giovanni Córdoba, acogiendo el informe del comité evaluador conformado por Katherine Salas Pérez (Jurídica); Fanny Tovar (Nutricionista); Aura María Escobar (Ingeniera de Alimentos), Juan de Jesús Laguna (Financiero), Christian Calimeño (Financiero) y Sergio Alarcón (Administrador).
Sin transparencia
“La Secretaría de Educación haciendo caso omiso a los requerimientos de la unión temporal, no público el informe final socializado el día 7 de octubre de 2021 ni la grabación de la audiencia celebrada el mismo día.
“Dicho informe demostraba claramente que la Unión Temporal Nutriendo Sueños Neiva era la propuesta más favorable para el proceso de selección en cuestión. La no publicación de este vulneró los principios de publicidad y transparencia establecidos en la ley 80/93”, argumentó el oferente al soportar la reposición.
No obstante, las observaciones planteadas por la UT los miembros del Comité evaluador y funcionarios de la administración no respondieron a ninguno de los cuestionamientos realizados.
Finalmente, Germán Castañeda Varona, responsable técnico del proceso, reiteró que la última adenda “sugiere una ambigüedad por permitir una dualidad en la interpretación de la tabla de puntuación”.
Con este argumento, la administración municipal mantuvo intacta la decisión de declarar desierto el proceso por estas razones. La decisión se confirmó mediante la Resolución 2219 del 05 de noviembre de 2021.Y procedió a adjudicar a dedo a una empresa foránea.
La estrategia
Como lo habían advertido los oferentes inconformes, la administración declaró la urgencia manifiesta y le entregó a una empresa santandereana, la distribución de los 38.091 mercados.
La medida quedó consignada en el Decreto 0849 de 2021 expedido el martes pasado y firmado por el alcalde Gorky Muñoz; el secretario de Educación, José Paul Azuero y el jefe de Contratación Hernán Mauricio Paredes.
La urgencia manifiesta fue declarada como una estrategia advertida por los proponente para terminar adjudicando directamente a otra empresa no huilense con vínculos políticos con la costa caribe y con Cambio Radical, movimiento que avaló a Gorky Muñoz.
Contratista foráneo
El contrato fue firmado el viernes pasado sin licitación con la Corporación Social Buen Corazón.
La empresa con sede principal en Bogotá, nació hace 17 años en Sincelejo (Sucre), pero se extendió a varias regiones del país principalmente en Santander y Norte de Santander, donde se consolidó como otro de los grandes operadores de la alimentación escolar.
La entidad nació como Corporación para el Desarrollo Social Tanai Jawa, que operó en la costa caribe. Luego llegó a Norte de Santander donde extendió sus dominios.
Por los múltiples escándalos en materia de contratación la corporación cambió de nombre el 11 de julio de 2018, un mes después de que la Procuraduría le abrió investigación disciplinaria al entonces gobernador de Norte de Santander William Villamizar Laguado, a la gobernadora encargada Sonia Arango Medina, y a la secretaria de Educación María Fabiola Cáceres Peña.
El cambio de nombre quedó registrado en la Cámara de Comercio bajo el radicado 033066958.
Investigaciones
Las investigaciones se originaron por cuatro convenios adjudicados a dedo por 51.000 millones de pesos.
La Procuraduría General de la Nación reveló que la selección de la Corporación para el Desarrollo Social Tanai Jawa (hoy Corporación Social Buen Corazón) se hizo “de manera sesgada y subjetiva”, sin tener en cuenta su idoneidad y experiencia”. La Contraloría General de la República también adelanta una investigación por estos hechos.
Aunque cambió de nombre, en medio de los escándalos, actualmente siguen como directivos de la Corporación Social Buen Corazón David Enrique Conde Calderón y Camilo Andrés Ramírez Numa, antiguos voceros de Tanai Jawa.
Vínculos políticos
El aterrizaje de esa corporación en los santanderes, según lo reveló el portal ‘La Silla Vacía’, fue promovido por el diputado de Cambio Radical Pedro Leyva Rizzo por los acuerdos electorales que pactó en el 2014 con el ex senador Julio Miguel Guerra Sotto, hijo del fallecido ex gobernador de Sucre Julio Guerra Tulena, y heredero de la poderosa casa política de los Guerra de Sucre.
Guerra Soto fue elegido Senador con la mayor votación en una alianza que hizo con el polémico ex congresista Yahir Acuña, apoyado por la condenada empresaria del chance Enilce López ‘La Gata’.
La Silla Vacía también mencionó a quien fue su asesor jurídico de la corporación hasta 2016 y luego representó a las empresas de los políticos del ex senador Efraín Torrado, exconcejal de Bogotá y ex congresista del Partido de La U respectivamente, vinculado a un cartel de la contratación de alimentos escolares en Bogotá durante el gobierno de Samuel Moreno, condenado por corrupción.
Los contratos objeto de las investigaciones fiscales y disciplinarias fueron otorgados a la Corporación de Desarrollo Social Tanai Jawa entre el 25 de enero de 2016 y el 5 de enero de 2017.
En esa misma época (marzo 17 de 2017) también resultó favorecida en el Huila con otro contrato para atender la zona dos que corresponde a los municipios ubicados en el norte. El contrato lo ejecutó la Unión Temporal Alimentando Los Niños del Huila, representada por Édgar Camilo Villareal Agudelo.
La unión temporal estuvo conformada por la Corporación para el desarrollo social Tanai Jawa y Gran Andina de Comercio Distribuciones, con representación legal de David Enrique Conde Calderón, y Nancy Guevara Toledo respectivamente, con una inversión de 18.074 millones de pesos.