La Fiscalía entregó ayer el escrito de acusación contra el contralor Departamental, Andrés Felipe Vanegas Mosquera, por la presunta agresión verbal y física a su entonces novia María Salomé Bahamón Vargas. La acusación será el próximo martes 26 de septiembre. “Se advierte un evento de violencia por la condición de ser mujer…se genera la incorporación de un perfilamiento de género…”, señala el documento.
Rafael Rodríguez C.
Un ‘arsenal’ de elementos probatorios, que va desde videos, fotografías y declaraciones de cuatro testigos presenciales, tiene listo la Fiscalía para demostrar la presunta responsabilidad del contralor Departamental del Huila, Andrés Felipe Vanegas Mosquera, en las agresiones verbales y físicas contra su entonces novia María Salomé Bahamón Vargas, secretaria Privada de la Alcaldía de Neiva.
Los elementos probatorios fueron consignados en el escrito de acusación, de 13 páginas, que entregó ayer el fiscal 48 Local, Andrés Felipe Salamanca Bejarano, a la defensa de Vanegas Mosquera y al representante de víctimas, en la audiencia virtual ante la Juez Cuarta Penal Municipal de Neiva con Funciones de Garantías.
La diligencia, que además contaría con la audiencia de acusación, terminó siendo aplazada por petición de la Procuraduría Judicial, para que todos los elementos probatorios que tiene la Fiscalía fueran socializados a las partes. “Lo que se busca con esta solicitud del Ministerio Público es que la defensa del Contralor Departamental y la representante de víctimas, conozcan en su integridad el escrito de acusación y en la audiencia de acusación expresen nulidades o aclaraciones y así no entorpecer el proceso exprés”, dijo una fuente judicial en diálogo con LA NACIÓN.
La nueva audiencia, en la que el fiscal acusará a Vanegas Mosquera y solicitará la medida de aseguramiento no privativa de la libertad, se realizará el próximo martes 26 de septiembre.

“Le pegó palmadas en el pecho”
El fiscal Salamanca Bejarano, en el escrito de acusación, conocido por LA NACIÓN, reveló paso a paso las presuntas agresiones verbales y físicas que habría sufrido María Salomé de parte de su entonces novio Vanegas Mosquera, desde que salieron de la discoteca Olé, pasadas las tres de la madrugada del pasado domingo 18 de junio de 2023.
La primera de las supuestas agresiones ocurrió cuando la pareja, que llevaba tres meses de convivencia, iba a abordar el vehículo que se encontraba en el parqueadero de la discoteca. Allí, al parecer, Vanegas Mosquera con palabras soeces se dirigió a la joven “refiriéndole que como él no era uno de sus mozos con él no se divertía y con él le daba mucho sueño…”.
Los insultos llevaron a María Salomé a decirle a su novio para la época, que no fuera grosero, que no le dijera nada, “pero Andrés Felipe continuó con las agresiones diciéndole que era una perra, la más perra de todas, que ella salía con su jefe y con el hijo”, relata el escrito de acusación presentado ayer por el fiscal Salamanca Bejarano.
Agrega que Vanegas abrió la puerta del acompañante de su vehículo y empujó a María Salomé para que se subiera, continuando con las presuntas agresiones verbales, “la gritó, le pegó en reiteradas ocasiones palmadas en el pecho, frenaba de forma abrupta para hacerla golpear…”.
La víctima, según el escrito de acusación, le decía a su pareja sentimental que no frenara de esa manera porque no tenía el cinturón de seguridad, pero este le contestaba “tras de perra bruta, colóquese el cinturón; agresiones que continuaron hasta la vivienda en la que habitaban”.
Indica el documento de la Fiscalía que cuando la pareja llegó al conjunto residencial Bosques de Santa Ana, ubicado en la carrera 42 con calle 18ª, donde convivían, María Salomé se bajó del vehículo e intentó dirigirse a la portería; sin embargo, su excompañero sentimental la alcanzó, la sujetó fuertemente de los brazos y le dijo que se tenía que ir con él al apartamento, ella le dijo que no, que la soltara mientras gritaba voces de auxilio.
“Ante esto, Andrés Felipe le pegó un golpe fuerte en el rostro en la parte del oído derecho tumbándola al piso, allí le propinó otra cachetada, la levantó, la arrastró hasta el ascensor y le metió los dedos en la boca para evitar que continuara gritando, situación que fue evidenciada por los guardas de seguridad del conjunto residencial”, explicó el fiscal del caso.
Sostuvo que en el ascensor, María Salomé se hizo en la esquina, se agachó, le dijo a su presunto agresor que no la lastimara más y que no tenía porque pegarle, al llegar al piso 8, Andrés Felipe salió y María Salomé cerró la puerta del elevador, bajó al primer piso y se refugió en la portería del conjunto junto a un guarda de seguridad, llamó a algunos familiares y salió del lugar en un vehículo de servicio público.
“Trastorno de ansiedad”
María Salomé tras salir del conjunto residencial se dirigió a la Empresa Social del Estado ‘Carmen Emilia Ospina’, donde recibió atención médica, el médico de turno dejó consignado en la historia clínica que la paciente presentaba un edema y eritema en labio superior e inferior, “se observa edema y eritema en paladar duro, no sangrado, equimosis mejilla izquierda, dolor en maxilar a la apertura bucal, dolor a la palpación en articulación temporomandibular derecha, dolor a la palpación en dorso de nariz, fisura en parte superior de incisivo lateral inferior derecho (…). Lesiones que son consecuentes con las fotografías y videos por ella aportados”, indica el fiscal en el escrito de acusación.
Al día siguiente, lunes 19 de junio de 2023, fue examinada por un médico forense adscrito al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, quien concluyó “mecanismos traumáticos de lesión: contundente; abrasivo. Incapacidad médico legal provisional catorce (14) días. Debe acudir a valoración por Odontología forense (…)”, señaló el funcionario judicial al referirse al examen forense.
Sostuvo el fiscal en el escrito de acusación que tras valoración psiquiátrica, se determinó que María Salomé “padece un trastorno de ansiedad, relacionado con el episodio de violencia intrafamiliar descrito”.
Violencia intrafamiliar
El fiscal, que acusará a Vanegas Mosquera como posible autor del delito de violencia intrafamiliar, señaló en el documento que la pareja sostuvo una relación sentimental y convivencia durante tres meses y existía un ánimo de permanencia, “singularidad y comunidad de vida percibida por terceras personas, quienes señalaron que Andrés Felipe iba a proponerle matrimonio a la víctima, y ante la sociedad le exigía comportarse como su esposa”.
Según el Código Penal, el que maltrate física o sicológicamente a cualquier miembro de su núcleo familiar, incurrirá, la pena sería de 4 años a 8 años. El delegado de la Fiscalía señaló que como recayó sobre una mujer el maltrato físico y verbal, la pena sería de 6 hasta 14 años de prisión. “Se advierte un evento de violencia por la condición de ser mujer en contra de la víctima antes referida, así las cosas se genera la incorporación de un perfilamiento de género…”.