La Nación
Estamos enfermos 1 23 abril, 2024
COLUMNISTAS

Estamos enfermos

Solo tiene 14 años, ingresó agonizando al servicio de urgencias. Una herida por arma de fuego le había seccionado la médula espinal dejándolo parapléjico, destrozando la tráquea e hiriendo severamente parte de un pulmón.

Hasta acá, esta historia sonaría como una más de las que a diario se repiten. Lo paradójico es que el balazo se lo propinó un amigo de él por petición propia de quitarle la vida. Huérfano de madre a los 3 años y abandonado por su padre, vivía el día a día jornaleando en fincas, recogiendo café; en la calle conoció las drogas, primero la marihuana y últimamente algo más fuerte, adeudaba 900 mil pesos en bazuco a un jíbaro. No había sentido para vivir mas, pensaba. Nunca logró tener un acompañamiento psicológico, nadie lo orientó en sus momentos difíciles. No encontró otra salida. Pero a pesar de la gravedad de las heridas salió adelante, logrando después de múltiples intervenciones superar la muerte. Esta es una historia que desafortunadamente se repite en los servicios de urgencias, el intento de suicidio como única solución.

La salud mental hoy en día es uno de los principales problemas que nos aqueja. Un ejemplo, la depresión se calcula afecta a mas de 300 millones de personas en el mundo según cifras de la OMS, siendo la primera causa de discapacidad, llevando en el peor de sus casos al suicidio. El COVID ha agravado los trastornos mentales, el temor y confinamiento afectaron en especial a niños, jóvenes y adultos mayores, con mayor incidencia en las mujeres.

Poco hacemos por este problema, la mayor parte de los escasos recursos de salud mental se destinan al sostenimiento de hospitales psiquiátricos, una mínima parte se destinan a   la prevención y acompañamiento.

Somos un país mentalmente enfermo, llevamos más de 50 años en guerra, estamos acostumbrados a la muerte; lo sucedido en días pasados en donde mataron a dos niños por un hurto menor es la demostración del grado de odio y deterioro mental que como sociedad hemos alcanzado.

Por eso urge tomar mejores decisiones en este aspecto, desde el colegio y el trabajo se debe apoyar la salud mental, poco hacen las empresas por el tema. Las instituciones educativas no cuentan con un acompañamiento suficiente para estudiantes y padres de familia. Necesitamos mas escuelas de padres y mejores programas de salud mental a todo nivel, lograr tener mejores ciudadanos, porque las secuelas que cargamos por la exposición a tanta violencia, difícilmente se pueden superar.