Jorge Augusto Corredor Rodríguez estudió en la Universidad Libre de Bogotá. Allí se graduó de Abogado en 1974. En la jurisdicción contenciosa administrativa está desde 1982 como magistrado del Tribunal Administrativo del Caquetá. Jorge Augusto Corredor Rodríguez estudió en la Universidad Libre de Bogotá. Allí se graduó de Abogado en 1974. En la jurisdicción contenciosa administrativa está desde 1982 como magistrado del Tribunal Administrativo del Caquetá. En el año 2002 fue trasladado a la ciudad de Neiva donde ejerce desde ese momento el mismo cargo de magistrado en el Tribunal Administrativo del Huila. Por fuera de las actividades de su cargo, como buen lector, se dedica a la lectura de diferentes temas, especialmente de literatura u otros aspectos enfocados también en lo relacionado con el carácter espiritual, que tienda a la formación de la persona en cuanto a su integridad humana, a ser condescendiente con sus semejantes y solidario con la humanidad. Un autor preferido desde tiempo atrás, e incluso cuando estaba en su bachillerato, ha sido José María Vargas Vila y sus obras literarias, “que aunque no son muy recomendables, me gustan por la forma en que están escritas estas historias, por la manera como Vargas Vila describe la personalidad de los protagonistas de sus libros, novelas. Su estilo de descripción del paisaje, de los seres humanos es único”. En el momento actual tiene una parcela en el municipio de Rivera y allí se entrega los fines de semana a actividades totalmente ajenas al tema del Derecho. Construyó una piscina, y se dedica a la natación, al igual que a los arreglos relacionados con el paisaje, las flores y demás aspectos pertenecientes a la agricultura. Para el magistrado Corredor Rodríguez “la justicia es lo contrario de lo injusto. Es decir hay que darle a cada quien lo que corresponde de acuerdo a sus necesidades, satisfacerlo en todo lo que requiera para su vida integral. Darle lo que necesita el ser humano”.