¡Nos entregaron un chile roto ¿cuándo nos lo van a remendar?, esto se nos volvió como un caloche, se deslizan y no se dejan agarrar de ninguna manera! Exclamó entre sorprendido e indignado don Roberto, campesino campoalegruno. ¡Nos entregaron un chile roto ¿cuándo nos lo van a remendar?, esto se nos volvió como un caloche, se deslizan y no se dejan agarrar de ninguna manera! Exclamó entre sorprendido e indignado don Roberto, campesino campoalegruno. No era para menos, después de haber estado durante nueve días en el paro agrario con cerca de 16.000 campesinos, que se levantó luego de llegar a un acuerdo con el delegado del Mininterior y la gobernadora del departamento, quienes se habían comprometido a que el pasado 30 de octubre darían inicio a la mesa temática agraria y de seguridad alimentaria, se encontró con que al recinto solo llegó el Secretario de Agricultura, sacando de la maleta el Plan de Desarrollo, que esgrimió cual culebra Margarita. Lo que no esperaba el representante del gobierno, acostumbrado a desconocer la autoridad de los ciudadanos, es que don Roberto y la dirección política de 25 campesinos que acudieron puntuales a la cita, respetando el valor de la palabra, de la que tanta gala hiso la gobernadora, se habían preparado juiciosamente y llevaban claritico lo que debería tratarse. Así que el responsable de la cartera agraria debió guardar a Margarita, que esta vez no logró ni asustar ni distraer. La perspicacia campesina advirtió que cuando se habían reunido con el gobierno departamental, este adujo que las respuestas a sus solicitudes correspondían al resorte nacional y, ahora, cuando se tenía la cita con el gobierno nacional, los primeros pretendían cubrir su incumplimiento al intentar atender una reunión sin capacidad de decisión. Los hechos son tozudos y los gobernantes tendrán que reconocer a los campesinos como sujetos políticos de derechos. El pasado primero de noviembre en audiencia pública de Zonas de Reserva Campesina en el Congreso de la República, con la participación de los ministerios de agricultura, medio ambiente y congresistas, llevaron la voz los campesinos huilenses, recordando los compromisos adquiridos por el gobierno en la pasada jornada de protesta e informaron que ya de hecho han constituido tres zonas de reserva. “Esta vez venimos a que el gobierno nos cumpla, no a que nos den montañas de papel firmadas que son sólo saludos a la bandera”. No nos iremos de nuevo con el chile vacío diría don Roberto. Al día de hoy se anuncia que después de 27 días de paro, los trabajadores de la rama judicial, reanudarán labores, luego de que el gobierno aprobara ochenta mil millones de pesos para cumplir con una deuda de hace 20 años ¿cuándo cumplirán con la deuda histórica de los campesinos, conflicto que ya lleva más de cincuenta años? ¿Se requerirá otra multitudinaria movilización y más de 37 heridos? No hay peor ciego que el que no quiere ver.