La Nación
COLUMNISTAS

Fortalecillas: 400 años de historia. Por Julio enrique Ortiz Cuenca

Como dijera Obama, no me hablen del pasado, hablemos del futuro. Fue el ambiente que vivimos en los 400 años de fortalecillas, donde el pueblo se siente orgulloso de su historia, se rebela contra las injusticias del presente y piensa en el futuro. Ha sido un pueblo libertario, amante de la democracia y  defensor de las ideas liberales. Tradicionalmente ha sido el sitio de recreación turística  de los neivanos. Sus gentes son amables, hospitalarias y nacen con  alma musical. Aman la cultura del rio, buenos pescadores  y poetas que le cantan a la vida. Sus paisajes son de gran belleza, enmarcados  por la majestuosidad del rio magdalena, refrescados por las aguas del fortalecillas y  la quebrada del venado. Ha sido despensa agrícola y fuente de energía al construir la primera planta eléctrica que dio energía  a los neivanos. Su gastronomía es de las mejores, siendo  famosa a nivel nacional por los deliciosos   bizcochos de achira, ejemplo del empuje de sus mujeres y  espíritu empresarial, siendo pioneras del trabajo artesanal y  las microempresas. Tienen un gran dirigente, de generoso corazón , sensibilidad social, vocación de servicio y ejemplo de superación, el concejal  Fulvo Mosquera, quien ha tenido como bandera la educación del sector campesino convencido que con la educación se combate la desigualdad y  la pobreza económica, mental y moral.  Ha sido  abanderado del colegio de Fortalecillas, que se inicio como privado por gestión de la junta de acción comunal, el cual   departamentalizamos y asumimos como publico cuando fui Gobernador. Tiene  gran demanda de cupos, trabaja a la intemperie y   en espacio reducidos, rotando sus alumnos en lo que han denominado “pico y placa”. Soñaban en sus cuatrocientos años con la planta física prometida por el anterior alcalde quien adquirió el lote y  tienen puestas sus esperanzas en el actual ingeniero Pedro Suárez que les prometió la construcción del Colegio. Siempre he contado durante mi vida pública con el respaldo y  amistad generosa del pueblo de Fortalecillas. Cuando iniciaba como líder de las juventudes liberales fui invitado a la primera  concentración  cultural, musical y política convocada por José Ignacio Tovar ‘El Papi Tovar’,  gloria musical como compositor e intérprete no solo de Fortalecillas, sino del Huila y del país. En la celebración de los cuatrocientos años fui condecorado, distinción que agradezco en el alma y portare con orgullo como  expresión de la nobleza y gratitud del gran pueblo de Fortalecillas .julioenriqueortiz@yahoo.com