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Jimmy Chamorro: hay indignación entre los colombianos 1 29 marzo, 2024
POLÍTICA

Jimmy Chamorro: hay indignación entre los colombianos

Jimmy Chamorro: hay indignación entre los colombianos 7 29 marzo, 2024
Chamorro sostiene que los diálogos de paz concluirían en diciembre.

Ocho años alejado de la actividad política, no impidieron que Jimmy Chamorro olvidara definitivamente lo que había hecho en su paso por el Congreso.

Pero Chamorro no quería volver, deseaba ejercer otro oficio, menos la política. Sin embargo, fue su amigo Sergio Díaz-Granados, quien en cuanto llegó a ocupar la dirección del Partido de la U lo convenció de encabezar la lista al Senado de la República.

De hecho, recuerda que fue él desde el Congreso que impulsó la inclusión de Colombia en la Corte Penal Internacional, y por eso, sostiene que precisamente desde el Senado piensa dar la batalla para hacer una reforma judicial juiciosa.

Chamorro dice que es vergonzosa la administración de justicia actual y por eso se requiere hacer unos cambios profundos que deberán partir desde el Congreso de la República al que busca volver, nuevamente.

¿Qué lo impulsa querer volver al Congreso?
Lo primero, sin duda alguna tiene que ver con lo que está sucediendo en La Habana, con las conversaciones de paz. El presidente del Partido de la U me insistió que era un tema fundamental, fui quien trajo a Colombia el Estatuto de la Corte Penal Internacional, hace más de 10 años. He trabajado el tema de los derechos humanos, el Derecho Internacional Humanitario, y estar ausente en este momento no hubiera sido prudente, de cara a un proceso de paz que creo que, va a llegar a feliz término.

Después de estar retirado de la política por tantos años ¿con qué panorama se encuentra hoy?
Desde el punto de vista del Congreso, estoy encontrando que hay varios de los que yo conocí que siguen ahí, hay caras nuevas, pero encuentro también un Congreso que quiere renovarse. Y por fuera del Congreso, hace 20 años veía indiferencia, apatía en un sector importante del país, ahora he encontrado indignación y eso preocupa. La diferencia es que la apatía lleva al colombiano a quedarse en la cama o irse de paseo el día de elecciones. La indignación es la que lo lleva a levantarse e ir a votar en blanco. Pero veo que la indignación puede estar siendo justificada.

Hay en este momento un Congreso desprestigiado, y la gente no se siente representada, ¿está usted enfrentando situaciones difíciles en esta campaña por cuenta de lo que está pasando?
Hemos encontrado mucha indignación e insisto en ese término pero también un rechazo hacia la clase política y una falta de credibilidad, pero lamentablemente el Congreso se la ha ganado. Por ejemplo, con la reforma a la justicia, el país no puede olvidar que este Congreso aprobó una reforma que si bien trató de enmendar después, echándola para atrás, la aprobó sin leerla. Un Congreso que no lee una reforma, que es sustancial para el funcionamiento del Estado y para el país, qué se puede esperar. También ha hecho mucho daño la ‘mermelada’ que para mí es otro elemento nuevo, en mi época le decían lentejas. Todo eso le quita credibilidad al Congreso porque se cree que la política no es clara ni coherente, y por el contrario es maquiavélica, que el fin justifica los medios y eso le hace mucho daño al país. Hay un gran desafío y en mi concepto este va a ser el Congreso más importante en la era republicana porque precisamente tiene la responsabilidad de adelantar las profundas reformas políticas y sociales que requiere el país.

¿Cuáles son esas reformas que hay que hacer ahora en el posconflicto?
La firma de la paz es un proceso complejo, difícil, pero creo que después viene el desafío más grande de todos que son las normas posconflicto. Si este Congreso no adelanta unas profundas reformas de carácter social y político, sería grave para el país y ahí sí vería que el país estaría al borde una asamblea constituyente, cosa que no recomiendo ni soy partidario de ella en un momento histórico como este para el país. Soy amigo del referendo, que sea el pueblo el que defina, qué le gusta del acuerdo y qué no.

¿Por qué no, una asamblea constituyente?
Lo primero, hay que darle la oportunidad al Congreso para que adelante esta iniciativa. El país va a estar muy atento de lo que haga el Congreso en este cuatrienio, de las reformas posconflicto y las de carácter social. No como la reforma a la salud que está a punto de salir y la que está el Legislativo más de dos años estudiando, que es nociva, peligrosa y que en aras de la responsabilidad fiscal es una amenaza contra la tutela que ha sido lo único que los colombianos sienten cercano de la Constitución. En segundo lugar, no me gusta la constituyente como la propone las Farc, que me parece sumamente peligrosa, es un salto al abismo y una amenaza para el país en este momento. La asamblea constituyente que plantean las Farc es absolutamente excluyente porque no sería abierta, ni por voto popular, ni donde cualquiera pueda ser candidato. Habrá unos cupos para unos sectores importantes que son necesarios en el país, como los indígenas, los campesinos, los ciudadanos de regiones afectadas por la violencia. Pero limitar una constituyente para que sea conformado por sectores exclusivos, minoritarios que si bien son necesarios, no justifica que sea excluido el resto del país, sería una constituyente de minorías legislando para una inmensa mayoría y eso es peligroso. Las Farc lo que quieren es una constituyente manejada por ellos.

¿Le va cara a una firma próxima de la paz?
Veo que el proceso va caminando muy lentamente, pero en esto tenemos que ser pacientes, rodear el proceso de paz, hay enemigos de ese proceso, todavía no estamos ni a mitad de camino, tenemos dos de los seis puntos acordados pero creo que de aquí a diciembre podremos tener un acuerdo completo, y ahí es donde comenzaría el proceso de paz.

¿En ese sentido, es que se necesita la reelección de Santos?
Más que la reelección del presidente Santos, las políticas de paz que este gobierno ha emprendido en estos casi cuatro años. Creo que es importante que continuemos con este esfuerzo. Lamentablemente en los candidatos que veo, además de Santos, no veo un ánimo de continuar en este sentido. Las Farc están sentadas con voceros del gobierno y no es fácil para éste, hacerlo, es un paso complejo, y es valioso que estén ahí porque al fin y al cabo uno se sienta a dialogar de paz con los enemigos, no con los amigos, los hermanos. Me parece que Santos no tiene quién eventualmente recoja esas banderas y por tanto debe ser él quien debe continuar.

‘Aquí no hay caguanes ni ralitos’

El candidato al Senado, Jimmy Chamorro les salió al paso a las continuas críticas que contra el proceso de paz hacen personajes como los expresidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana. Dijo que se trata de razones netamente políticas. “Creo que una de las razones por las cuales estamos dialogando en Cuba es precisamente por él, no podemos negar que el país rodeó a Uribe en su momento con su política de seguridad democrática, pero este gobierno no ha dejado de combatir la insurgencia, y ahora hay que dar el siguiente paso, y es el diálogo para ponerle fin al conflicto”.

Y advirtió que este es un proceso en el no se está vulnerando la soberanía nacional. “Aquí no tenemos despejes, no hay caguanes, no hay ralitos, y da la casualidad que precisamente quien entregó el Caguán y quien entregó Ralito a la guerrilla y a los paramilitares, respectivamente, son los que están unidos criticando el proceso de paz”, sentenció.

Concluyó diciendo que como si fuera poco, en esta oportunidad hay una agenda de diálogo, de la que se sabe que tiene seis puntos, cosa que no ha ocurrido en el pasado con otros intentos de diálogos con la guerrilla. “Creo que nunca habíamos avanzado tanto como lo estamos haciendo ahora. No quiero decir con esto que estamos satisfecho, lo estaremos en el momento en el cual acordemos el último punto”.