La oportunidad de renovar y fortalecer nuestro Festival se aproxima con la efeméride de Neiva. La Historia de la comarca neivana y la de sus fiestas se entretejen y se abrazan en la vaporosa congestión de los tiempos. Es la oportunidad de rescatar los grandes esfuerzos y gestiones emprendidas por las Secretarías de Cultura y Turismo del Huila y de Neiva, y las comunidades, durante todo 2010, cuando se conmemoró el “Cincuentenario Festival Folclórico”, reafirmándose nuestra fiesta magna. Siguen vigentes los enjundiosos documentos y reflexiones aportadas por estudiosos del egregio evento quienes aportaron y contribuyeron con entusiasmo desmedido: La Academia Huilense de Historia, la Universidad Surcolombiana, insignes gestores y promotores culturales, entre otros. El Festival Folclórico es un preciado valor de la cultura nacional. A veces lo olvidamos. Es cierto, el Festival Folclórico debe ser direccionado y fortalecido con procesos reglamentados y diferenciados, con política pública renovada, etc. Esto exige encontrar y definir parámetros de regulación, certificación y normalización, (sistemas de indicadores y estándares para cada uno de los productos culturales y comercializables, incluido el reinado), con estímulos y nuevos protocolos que modulen la totalidad de la oferta folclórica y turística. No se debe olvidar que las festividades de San Juan y San Pedro tienen sentido histórico, religioso y carnavalesco (momentos de encuentro y disfrute), transcurren para divertirse y reír también. Las bromas, el ingenio y el buen humor son muy comunes entre los huilenses. El sampedrito, por ejemplo, es una institución histórica que aún mantiene la intencionalidad de “hacerle pasar buenos momentos” a quienes se desea desagraviar, criticar, ridiculizar o compensar, en respuesta a alguna razón justificada por el pueblo. Buen ejemplo de ello son las coplas y “rajaleñas”. Conviene rescatar y proyectar esta cualidad de la identidad cultural y abrirle especiales espacios a los cuenteros, los relatos picantes, a las campañas centradas en el humor y la comicidad, las comparsas y sátiras, fomentar escuelas de humor. En fin, se espera que los organizadores, por esta vez, retomen el hilo conductor de los progresos conseguidos en el “Cincuentenario Festival Folclórico” y podamos disfrutar los diversos escenarios inter – culturales. En efecto, como auténtico homenaje a Neiva en sus primeros “400 Años”. Se lo merece.