Rodeado por toda la Delegación del Gobierno en los diálogos de paz, el general Jorge Enrique Mora Rangel desmintió ayer, desde La Habana (Cuba) los rumores sobre su supuesta salida de la Mesa de Conversaciones.
“Eso no es cierto. No tiene nada de certeza, no tiene ningún fundamento”, aseguró en el Palacio de las Convenciones de la capital cubana desvirtuando versiones radiales sobre su renuncia.
Mora Rangel, uno de los miembros claves del equipo negociador, dijo que las negociaciones marchan a buen ritmo. “Aquí seguimos avanzando en medio de un proceso de estos con sus propias dificultades, pero avanzando. Pensando en los colombianos y en nuestros soldados”.
Mora, de 59 años, fue comandante del Ejército en el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002) durante un fallido proceso de paz en el Caguán.
El presidente Juan Manuel Santos lo nombró delegado en las conversaciones de paz de La Habana, iniciadas en noviembre de 2012 Mora fue comandante de las Fuerzas Armadas, cargo en el que dirigió la primera fase del "Plan Patriota", la más grande operación contrainsurgente desarrollada en el sur del país.
El militar renunció en 2003 y al año siguiente Uribe lo designó embajador en Filipinas y Corea del Sur.