La Nación
ECONOMÍA

‘Gobernación no tiene la capacidad para comercializar el Doble Anís’

Orlando Rojas Bustos, dueño de Licorsa, empresa que manejó durante 10 años la última concesión y que en la actualidad tiene bajo su cargo la comercialización y distribución del Doble Anís, indicó que el Departamento no tiene la capacidad y logística necesaria para asumir la venta del anisado. Orlando Rojas Bustos, dueño de Licorsa, empresa que manejó durante 10 años la última concesión y que en la actualidad tiene bajo su cargo la comercialización y distribución del Doble Anís, indicó que el Departamento no tiene la capacidad y logística necesaria para asumir la venta del anisado. Recalcó que lo más conveniente es que se realice una licitación pública. ALEJANDRA MONTOYA FALLA LA NACIÓN, NEIVA La posibilidad de que se adopte un nuevo modelo para producir, comercializar y distribuir el Aguardiente Doble Anís en el Huila, tras más de cuatro años de haber finalizado la última concesión, ha generado diferentes reacciones en torno a la conveniencia de que la Gobernación asuma la comercialización del licor departamental. Orlando Rojas Bustos, dueño de Licorsa y quien en la actualidad tiene bajo su cargo la comercialización del anisado, indicó que si el Departamento asume la mercantilización del Doble Anís, se correría el riesgo de perder participación en el mercado, puesto que la Gobernación desconoce dicho contexto y no cuenta con la logística necesaria para asumir tal responsabilidad. En diálogo con LA NACIÓN, fue enfático al destacar que la mejor opción para el Huila es que se realice una licitación pública para la producción y comercialización del aguardiente, puesto que en dicho proceso las licoreras estatales entrarían a competir de igual a igual con la empresa privada, proceso que ganaría quien presente la mejor propuesta para el Departamento. Indicó que en la actualidad en el Huila se comercializan 1’800.000 unidades anuales de Doble Anís, mercado que se ha mantenido gracias a las actividades de promoción y mercadeo que se realizan. ¿Cómo ve el modelo que planteó Fedesarrollo de que la Secretaría de Hacienda asuma la comercialización del Doble Anís y no la empresa privada? Yo escuché las declaraciones del doctor Luis Guillermo Vélez y me pareció muy claro y transparente en sus apreciaciones. Sin embargo, uno tendría que hacerse algunas preguntas frente a esa recomendación de Fedesarrollo, en el sentido de cuál es el mejor modelo para contratar la producción y comercialización del Doble Anís. Yo me pregunto qué pasa con las demás licoreras del país que no han copiado el modelo de Nariño si es tan exitoso como dice Fedesarrollo. Si eso fuese así, las demás licoreras que tienen más de 100 años en el mercado, hace mucho lo hubiesen adoptado. La segunda pregunta a formular es si es cierto que todo ese margen que queda al distribuidor es una utilidad que le quedaría al Departamento, es claro que no. Ese porcentaje no se lo gana todo el distribuidor, no es plata que se echa al bolsillo el distribuidor, pues de estos recursos se deben hacer millonarias inversiones en aspectos publicitarios, de mercadeo y posicionamiento de marca, logística que en este momento no tiene la Gobernación. ¿Qué debería tener el Departamento para asumir la comercialización del Doble Anís? El capital para la compra de aguardiente es un dinero que debe disponer el comercializador y esto tiene un costo financiero. Hay que disponer de recursos para traer ese aguardiente, y es una plata que pone el distribuidor. Por consiguiente, a ese margen que dicen que tiene el distribuidor hay que restarle ese aspecto, que nadie lo ha tenido en cuenta y es un monto muy importante. Si Hacienda asume la responsabilidad hay que preguntarse quién pagará la publicidad, quién contratará la pauta de promoción, quién va a sacar el dinero para el patrocinio de los más de 1.000 eventos que financia Licorsa al año, que van desde un bazar en un municipio hasta las celebraciones culturales de las localidades. Todos estos eventos los financia el comercializador con el margen de distribución. De igual forma hay que tener la logística necesaria, tarimas, carpas, dummies para respaldar cientos de eventos de toda naturaleza. Esa logística requiere una inversión costosa, que sale del bolsillo del distribuidor y eso es una inversión millonaria. ¿Para todas estas labores que se generan en la comercialización se requiere de un amplio personal? Por supuesto que sí. Se requiere contratar con el personal necesario para que realice el mercadeo correspondiente al Doble Anís en los supermercados y establecimientos comerciales, logística que igualmente deberá asumir el Departamento si toma bajo su cargo la comercialización y distribución del aguardiente. Son muchas las labores a realizar en la comercialización y esto resultaría engorroso para una entidad estatal. ¿Considera que la Gobernación no tiene la logística necesaria para asumir la responsabilidad? El Departamento carece de la estructura para realizar esta labor. Sería retroceder a un mecanismo que se utilizó en el pasado y que no dejó buenos resultados. Si se entra a improvisar, en algo tan serio para el Huila, se corre el riesgo de que el mercado del aguardiente decaiga y eso afectaría directamente las rentas departamentales. Eso se debe pensar muy bien antes de tomar una decisión. Para mí es claro que no tienen la capacidad para comercializar el Doble Anís. ¿Conoce el modelo que opera en Nariño y si es exitoso como lo plantea el estudio que presentó el Gobernador encargado? A mí me parece muy bueno y transparente el planteamiento del doctor Vélez, porque entra al debate y hay que revisar el modelo, pero hay que responder todos estos interrogantes antes de tomar una decisión. Una cifra que hay que tener en cuenta es cuántas unidades de aguardiente está vendiendo en la actualidad Nariño, frente al dato que tenían cuando arrancó el modelo que se aspira a adoptar en el Huila. Si mis datos no fallan, con registros de la Licorera de Caldas que es la que le produce a ellos, en seis meses habían maquilado un poco más de 300.000 botellas, lo cual es muy poco, pues hace varios años Nariño vendía dos millones de unidades de aguardiente. Esas cifras son las que se tienen que analizar antes de tomar una decisión. ¿Por qué cree que ya van dos administraciones desde que finalizó la última concesión y hasta ahora ninguna finalmente sacó a licitación este importante negocio? Una de las razones por las que ha habido tanta dilatación para sacar una nueva licitación es que este proceso implica que deben tener una información bastante realista y objetiva de cómo está el mercado del aguardiente Doble Anís. Y eso no quiere decir que el concepto de Fedesarrollo lo haya hecho de mala fe, simplemente desconoce la realidad del mercado de cómo opera un distribuidor y cómo vienen operando las licoreras estatales. Igualmente ha faltado voluntad y eficiencia. ¿Por qué cree e insiste en contratar la producción con una licorera estatal y no con la empresa privada? Hay una concepción y es que las licoreras oficiales dejan mejores precios. Yo con todo respeto creo que no. Yo pienso que el sector privado, al producir semejantes volúmenes, ofrece mejores resultados porque el sector privado usualmente es mejor administrador que el sector público. Y eso lo podemos demostrar porque en la concesión anterior que tenía Licorsa, dejamos unas utilidades extraordinariamente buenas que jamás había tenido el Departamento, estamos hablando que las cifras son superiores a 50.000 millones de pesos en 10 años, recursos que entraron a la Gobernación y esos dineros no hubiesen entrado si hubiese operado la Industria Licorera del Huila. El sector privado tiene cómo demostrar que es más eficiente. ¿Insiste en que la licitación es la mejor opción? No sé cuál es el temor de que sea una licitación pública, proceso que lo único que exige del gobernante es un mayor esfuerzo, una mayor profundización de estudios y efectividad en la presentación del proceso. Yo pienso que los contratos interadministrativos son unos actos de carrera y por ser entre dos entidades del Estado no implica mejores precios. Invito a que se compruebe en una licitación si el sector oficial va a ofrecer mejores precios que un empresario privado. Una licitación es un proceso que pone a todos en igual de condiciones y eso es lo que se debe hacer en el Huila. ¿Considera que usted como empresario privado le formularía una mejor propuesta económica al Departamento, mayor a las ganancias que se generan si una licorera estatal tiene la producción del Doble Anís? El sector privado, del cual yo hago parte, no le da temor a competir con las licoreras oficiales y si a ellos la economía de escala le da mejores márgenes, pues que lo comprueben y que gane la mejor propuesta. Considero que yo como empresario privado le doy mayores garantías al Departamento, e incluso, ellos abiertamente pueden ejercer el control sobre todo el proceso que realizaríamos como concesionario produciendo en el Huila, algo que difícilmente puede hacer la Gobernación si contrata la producción en otra región. ¿Cómo está el mercado del Aguardiente Doble Anís en este momento? En este momento estamos vendiendo 1’800.000 unidades de Doble Anís equivalentes a 750 mililitros, volumen que comercializamos en el 2011 y en el 2012. Habría que mirar si el modelo de Nariño garantizaría la permanencia de esas ventas, pues es claro que se ha ganado bastante terreno. ‘Debe hacer licitación’: Contraloría Aunque el gobernador encargado Luis Guillermo Vélez Cabrera indicó que si el Departamento contrata la maquila con una licorera estatal, tal y como lo plantea el estudio que realizó Fedesarrollo, dicho contrato interadministrativo podría ser adjudicado mediante una invitación. La Contraloría Departamental en su más reciente informe de auditoría al tema de licores fue  enfática al destacar que la modalidad de contratación que deben adelantar las entidades territoriales para la explotación del monopolio rentístico de licores destilados debe ser mediante licitación pública y no por contratación directa, como lo ha venido haciendo el Departamento del Huila desde el 2009. Según la Contraloría Departamental, los nueve contratos interadministrativos que ha suscrito el Departamento a partir del año 2009 hasta el 2012 con la Fábrica de Licores de Antioquia para garantizar la producción, comercialización y distribución del Doble Anís no han sido claros, puesto que no se desarrolló la respectiva licitación pública como lo establece la ley y por el contrario fueron adjudicados de manera directa.