Los intensos combates en el Catatumbo, entre el Eln y disidencias de las Farc han provocado un alarmante desplazamiento de más de 5.000 personas, dejando al menos 80 muertos, incluidos firmantes del acuerdo de paz y un líder comunitario. En respuesta a esta emergencia humanitaria, la Gobernación de Norte de Santander ha habilitado el Estadio General Santander como albergue temporal.
El Catatumbo, una región históricamente marcada por la violencia y la presencia de grupos armados, está atravesando una de las crisis más severas de su historia reciente. Actualmente, los combates entre el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y disidencias de las Farc, han desencadenado una ola de desplazamientos masivos que recuerda las épocas más oscuras de la violencia en Colombia, pero que, en su magnitud, supera incluso los episodios de los años 90.
Hasta la fecha, las autoridades a través de comunicados oficiales han reportado un saldo trágico de al menos 80 muertos, entre ellos siete firmantes del acuerdo de paz y un líder comunitario reconocido en el Catatumbo. Este contexto de violencia ha llevado a que más de 5.000 personas hayan sido desplazadas, buscando refugio en localidades como Tibú, Ocaña y Cúcuta.
De estadio a albergue
La situación es crítica, y las autoridades locales han tomado medidas urgentes para atender a la población afectada. Ante el inminente aumento en el número de desplazados, la Gobernación de Norte de Santander ha habilitado el Estadio General Santander como albergue temporal.
Freddy Arengas, secretario de Gobierno, aseguró que a Ocaña han llegado 823 núcleos de familias, la gran mayoría compuestos por cuatro personas, pero se han presentado casos donde llegan familias con 10, 15 y hasta 30 personas. En este municipio, se han habilitado seis albergues para brindar ayuda humanitaria.
Entre tanto, el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, se ha mostrado preocupado y en declaraciones a medios nacionales, afirmó que la llegada de desplazados es constante y que la situación está lejos de estabilizarse. “Estamos de la mano de Dios, dando todo de nosotros para poder responder a esta situación de nuestros hermanos del Catatumbo. Hay que estar preparados para todos”, agregó Acevedo. Sin embargo, la situación es compleja y plantea desafíos en múltiples frentes, desde la atención humanitaria hasta la seguridad y la salud pública.
Fines humanitarios
La defensora del Pueblo, Iris Marín, llegó ayer a Ocaña para verificar la situación de orden público y vulneración de derechos frente a la situación que se vive en el Catatumbo. Tras el análisis de la situación, la defensora aseguró que recibió una petición directa de las organizaciones sociales del Catatumbo para que interceda ante los grupos armados con fines humanitarios.
“Me comprometo a transmitirla formalmente al Estado Mayor de los frentes 33 de las extintas Farc y el Eln. Respaldo esta solicitud por la vulneración muy seria al derecho internacional humanitario y un irrespeto a la vida de personas que están en situación de vulnerabilidad”, señaló la defensora.
“No habrá acuerdos de paz
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, se refirió a la crisis humanitaria en el Catatumbo por cuenta de los enfrentamientos entre el Eln y las disidencias de las Farc. De acuerdo con el ministro, “hemos estado conectados con las autoridades desde el mismo jueves, el viernes estuvimos con el presidente en el Consejo de Seguridad”.
Asimismo, se refirió a la decisión del Gobierno Nacional de suspender los diálogos con el Ejército de Liberación Nacional, “el Eln ha tomado la decisión, unilateralmente, de romper los diálogos de paz con el Estado y ha botado a la basura, una vez más, creería que, de forma definitiva, la oportunidad de construir la paz en Colombia”. En esa misma línea, el ministro fue claro al mencionar que “no cabe ninguna posibilidad de un acuerdo de paz con el Eln y el Estado tendrá que enfrentarlos.