Los habitantes de Fortalecillas procedieron ayer a taponar la vía que comunica a Neiva con el norte del Huila para captar la atención de los entes gubernamentales y buscar una solución a sus problemáticas.
Carolina Argüello Cruz
Son varias las inconformidades que aquejan a los habitantes del corregimiento de Fortalecillas, ubicado en el norte de Neiva. Entre las necesidades más sentidas está la recuperación de la vía que de Neiva conduce a dicho corregimiento y a municipios como Tello, Villavieja, Baraya y Colombia; exactamente en un puente de paso vehicular deteriorado por los años y la falta de mantenimiento.
De acuerdo con Ulises Sánchez, veedor de salud y líder de la vereda El Venado de Fortalecillas, esta problemática viene desde hace cuatro años porque la vía poco a poco ha ido desapareciendo, al punto de quedar habilitada por un solo carril.
“Cada nada se presentan accidentes, incluso a los conductores de los colectivos se les olvida y ha habido ocasiones en que por poco se van abajo con pasajeros y todo”.
Otra de las preocupaciones de los pobladores de la zona es el alumbrado público, pues la oscuridad sirve de cómplice para los hurtos y accidentes.
“Por acá abundan los robos y sobre todo que por acá los muchachos aprovechan la noche para hacer piques. Esto es un peligro sin alumbrado”, relató Ulises Sánchez, quien ha sido líder durante 48 años.
Pero la gravedad de la situación aún no termina. Exactamente en la vereda El Venado, donde habitan cerca de 50 familias, se encuentra ubicado un horno crematorio que corresponde a la Funeraria San José y esto ha provocado una emergencia sanitaria entre la comunidad.
“Esos son unos olores la cosa más horrible, además esa humarada todo el día es terrible. Un humo negro y espeso todo el tiempo porque ahora con la pandemia le faltan horas al día para cremar, eso es de día y de noche”.
La comunidad, desesperada, no aguantó la pasividad tanto del Gobierno Municipal y Departamental y procedió a taponar la vía principal y llamar la atención a través de las vías de hecho.
Al sitio acudió el secretario de Gobierno de Neiva, Faiver Hoyos Hernández; así como el secretario de Vías del Huila, Germán Ortega, para escuchar a los pobladores de la zona y brindarle una pronta solución.
Hoyos Hernández le dijo a LA NACIÓN que ayer mismo se realizó la primera mesa técnica en la que se tomó la decisión de analizar la viabilidad por la urgencia de la obra, de hacer una declaratoria pública de emergencia para hacer la intervención que corresponda.
“Esperamos que el puente pueda ser intervenido en la mayor brevedad. En la mesa técnica se acordó una segunda reunión para trabajar temas relacionados con el alumbrado público en la zona, lo que tienen que ver con el mejoramiento de la malla vial, la rocería necesaria a los costados de la vía para mejorar la visual de quienes se transportan en vehículos y adicionalmente un tema de reductores de velocidad que reclama la comunidad”.
En el segundo encuentro que se realizará hoy desde las 2:30 p.m. hará presencia Gestión del Riesgo, Secretaría de Medio Ambiente y Secretaría de Salud para analizar la presencia de fábricas y del horno crematorio que viene generando problemas de contaminación.
“Lo importante es que la comunidad nos ha escuchado y le hemos pedido cinco días hábiles para poder dar respuesta”.