Así como en la mayoría de las cárceles del país, en Neiva el hacinamiento que padece actualmente el establecimiento carcelario, duplica su capacidad. Esto desencadena en difíciles problemas sanitarios que se agudizan por el deterioro de la infraestructura.
Heidy Lorena Sánchez Castillo, personera de Neiva, ha venido realizando visitas periódicas al establecimiento penitenciario, constatando la difícil situación que sobrellevan los internos, debido a que la capacidad del penal se desbordó y el hacinamiento alcanza el 80 por ciento.
“Hemos identificado varias problemáticas, una es que en estos momentos el establecimiento tiene un hacinamiento del 76%, para el 8 de marzo habían 1.671 internos y la capacidad de las instalaciones de este centro carcelario es de 900 personas”, señaló la personera.
La difícil situación implica que las personas que están internas están sometidas a unas condiciones bastante críticas. Según Sánchez Castillo, no se cumple con los objetivos de resocialización y el tema se convierte en deshumanización. Los internos pueden salir peor de lo que estaban.
Entre las preocupaciones de la Personería está la crítica situación del Inpec, ya que el hacinamiento repercute en la capacidad de respuesta de los funcionarios que se ve limitada, además, por la situación de fragilidad que en estos momentos presenta el sistema.
“El Inpec en este momento tiene que cumplir una función de custodia y seguridad de los internos, pero todo lo que tiene que ver con instalaciones, soporte del servicio, están a cargo de una entidad creada por el Estado, llamada el Uspec. La respuesta institucional que esta entidad debe darle a los centros penitenciarios realmente está siendo muy mínima”, explicó la funcionaria.
LAS CRÍTICAS CONDICIONES DE LOS INTERNOS
En el caso del pabellón de mujeres, la capacidad de las celdas alberga el doble de su capacidad y la infraestructura del penal presenta muchas debilidades por el deterioro del tiempo. Un sector de la cárcel data de 1990 mientras que el otro de 2002.
“La infraestructura que data de más años, es una infraestructura desgastada, es una infraestructura que está altamente impactada por temas de humedad, por temas de la misma estructura como tal; de hecho, en años anteriores en uno de esos patios hubo un incendio que quemó todos los dormitorios”, añadió.
Pese a que hay una unidad de sanidad que cuenta con consultorios, laboratorios, una enfermera y algunos médicos, los internos denuncian que muchas veces no reciben la atención que necesitan a tiempo. Las condiciones del establecimiento carcelario se presta para la proliferación de enfermedades infectocontagiosas, respiratorias y bacterianas.
La personera señala que la situación ha mejorado con el paso de los años y gracias a la intervención de entidades de control. Pero, los formalismos y trámites dificultan una atención inmediata.
Fiduprevisora es la entidad que maneja el tema de salud de los internos y debe realizar un riguroso proceso para aprobar citas con especialistas y otras intervenciones.
“Mientras sucede eso fácilmente pueden pasar 15 o 20 días hábiles, entonces finalmente el paciente interno ve desmejorada su atención porque no es eficiente, y hay casos que pueden esperar, pero hay otros que no”.
QUEJAS POR LOS ALIMENTOS
Los internos en sus reiteradas quejas, aseguran que se sienten cansados debido a que siempre consumen los mismos alimentos y no hay variación de menús. Asimismo, las instalaciones donde se preparan son viejas y necesitan adecuarse a los estándares actuales, exigidos por la norma.
“Ellos tienen clasificación de los alimentos, hay una ingeniera de alimentos, pero hay una queja de los internos con respecto a los alimentos en el sentido de que ellos se cansan de la alimentación, porque siempre son los mismos alimentos, entiendo que esto es un tema estandarizado, que la Uspec maneja a nivel central, envían una serie de menús, controlan la porción que deben darles, y esto está avalado por un nutricionista”, afirmó la funcionaria.
HUMANIZAR AL PENAL
Todos estos antecedentes motivan a la Personería a hacer un urgente llamado a las entidades competentes, para que humanicen las condiciones de estancia de los internos.
“Es un llamado a humanizar el sistema carcelario y penitenciario en la medida de que la situación carcelaria, para nadie es un secreto, es bastante crítica a nivel nacional y Neiva no dista de esta realidad, es hacer el llamado como Personería de Neiva, abogando por los derechos de estas personas” Concluyó.
Hacinamiento en Colombia
El hacinamiento en el país está desbordado, por cada nuevo cupo que se crea en una cárcel colombiana, llegan tres reclusos.
Las cifras de Inpec señalan que en 2016 había un total de 121.356 reclusos en el país, donde solo había capacidad para 77. 953.