«El tabaco mata hasta la mitad de las personas que lo consumen. Cada año, más de 8 millones de personas fallecen a causa del tabaco. Más de 7 millones de estas defunciones se deben al consumo directo de tabaco y alrededor de 1,2 millones son consecuencia de la exposición de no fumadores al humo ajeno». Datos y cifras de la Organización Mundial de la Salud.
Uno de los ejes fundamentales que contempla la propuesta de reforma tributaria tiene que ver con la incorporación de los impuestos saludables y ambientales cuyo propósito, de una parte, es reducir el consumo de alimentos que tienen efecto adverso, conforme evidencia científica, en la salud de las personas y de otra, propender por la sostenibilidad, conservación y mejoramiento en materia ambiental.
Así las cosas, en medio del debate toma fuerza la iniciativa formulada por organizaciones defensoras de la salud para que desde el marco de una política tributaria se introduzca el incremento del impuesto sobre el consumo de tabaco, incluidos los novedosos cigarrillos electrónicos, como mecanismo de presión no solo para desestimular el consumo sino también para contrarrestar el aumento de enfermedades atribuibles a este devastador flagelo asociadas a patologías cardiacas, respiratorias, accidentes cerebrovasculares, por citar solo algunas.
Cabe destacar que la contraofensiva adoptada tras la medida fiscal por Argentina, Brasil, Costa Rica, Uruguay, Chile, Perú y Colombia –que dicho sea de paso tiene uno de los impuestos al cigarrillo más bajo- viene representando importantes beneficios para la salud y la economía como herramienta efectiva para hacer frente a una de las mayores epidemias del siglo XXI.
«Ante esta enorme amenaza, la respuesta debe ser igualmente agresiva. Las medidas de control funcionan y debemos avanzar más rápidamente en la aplicación de todas ellas». Esa es la conclusión a la que ha llegado la Organización Panamericana de la Salud pues de continuar las actuales tendencias de consumo y exposición involuntaria al humo de tabaco tal circunstancia se convertirá en una verdadera bomba de tiempo que de no desactivarse prontamente el futuro que nos espera no será el más halagüeño.
Por estas y otras muchas razones la iniciativa resulta sin lugar a dudas de especial prioridad. ¡Enhorabuena…!!!