Las llamadas redes sociales como el Facebook, Myspace, Twitter, Hi5, YouTube y Sonico, constituyen un fenómeno de gran impacto en los jóvenes de nuestra sociedad. Las llamadas redes sociales como el Facebook, Myspace, Twitter, Hi5, YouTube y Sonico, constituyen un fenómeno de gran impacto en los jóvenes de nuestra sociedad. Es la forma en que interactúan la mayoría de adolescentes y jóvenes del nivel secundario y universitario, donde buena parte de su tiempo sea libre o no, la pasan frente a un ordenador, influyendo en su desempeño académico, en las relaciones personales, sociales y familiares. Los menores de edad usan la computadora para comunicarse con sus amigos y para jugar, el ir de un lado a otro con un solo “click” atrae su impulsividad, curiosidad y necesidad de gratificación inmediata. Sin embargo el acceso a una cantidad infinita de información, puede presentar riesgos reales y peligros para el niño que no tiene supervisión por parte de sus padres o adultos responsables de su atención y cuidado. La mayoría de los padres advierten a sus hijos que no deben de hablar con personas extrañas, abrirle la puerta a desconocido o dar información a cualquiera que llame por teléfono. La mayoría de los padres controlan dónde van a jugar sus hijos, cuáles programas de televisión deben de ver y los libros y revistas que ellos leen. Sin embargo, muchos padres no se dan cuenta que el mismo nivel de supervisión y orientación se debe de dar para el uso de las conexiones online. Los padres no deben de suponer que los servicios de conexión en línea protegerán y supervisarán a los niños. La mayor parte de los chat rooms o grupos de noticias no están supervisados. Algunas lamentablemente pueden ser usadas para fines ilícitos, nunca se sabe realmente con quien se habla. Una persona puede decir ser alguien conocido, cuando en realidad es un impostor que puede buscar hacer daño. Además cuando se busca la privacidad no es seguro, porque no hay en forma real, documentos que aseguren la verdadera privacidad de los datos que se suministran a la red como requisito para acceder a ellas. Los padres de familia deben ejercer cierto control con los hijos aún preadolescentes, sin invadir su intimidad, evitando daños colaterales de orden familiar. Buscar herramientas que filtren contenidos como sexo, violencia o lo que el progenitor considere necesario dada la edad del menor. Comprender que la responsabilidad es pieza fundamental en el desarrollo personal y social de sus hijos, que este es un asunto sobre el que deben tener algún conocimiento o noción, para tener un criterio de orientación, supervisión y acompañamiento adecuado para con sus hijos.