La Nación
La autoridad intimidada 1 20 abril, 2024
COLUMNISTAS

La autoridad intimidada

Germán Palomo García

Todo el país presenció atónito las imágenes proyectadas por los noticieros en las que un supuesto indígena colocaba su machete sobre el cuello de un militar que cumplía con su deber de recuperar un terreno invadido en el departamento del Cauca. Afortunadamente, el militar disparó al piso pero bien pudo dispararle en legítima defensa, algo que, al parecer, solo se acepta en este país en favor de los asesinos y no de quienes realmente se han defendido de ataques arteros como los que presenciamos los colombianos terminando el 2017. Por los mismos días, la televisión mostró a un encapuchado que le hablaba en tono amenazante al alcalde de Apartadó, uno de los municipios del Urabá antioqueño afectado por la ubicación de los tres peajes explosivos, prácticamente secuestrado por la turba que finalmente quemó dos de los tres peajes, conminándolo a que fuera a ponerle la cara a los manifestantes o que el encapuchado no se haría responsable por lo que le pudiera ocurrir. Esto no pasa sino en Colombia; la autoridad no se respeta. Se desconoce olímpicamente y, a diario, la televisión muestra escenas repetidas de irrespetos contra la autoridad. Cuando esta se defiende (porque no podría decirse que se ejerce) entonces son encarcelados o sometidos a juicio sumario. Qué estabilidad jurídica se le puede ofrecer a un inversionista que requiere de ella para pensar en Colombia como su lugar para invertir o desarrollar su negocio cuando observa que aquí son otras fuerzas las que definen el quehacer cotidiano de los colombianos…

La paz pasa por el respeto a la autoridad y que el marco jurídico y constitucional del país se reconozca como el único que impera en Colombia y no lo que cada quien quiera hacer. Una gran tarea por hacer, desde la cuna, es el reconocimiento de la autoridad dentro de la cultura ciudadana. Observo a diario el clarísimo irrespeto de los motociclistas de los semáforos y el uso de la luz en las noches y no he visto a ninguno ser sancionado porque no encienden sus luces. Son muchas las motos que incautan pero por falta de documentos. Ayer no más vimos cómo se oponía un motociclista infractor a que se llevaran su moto y acusó a los policías de lesiones personales por el uso de sus pistolas tyzer eléctricas.

Si a comienzos de año es la época de expresar nuestros deseos, ojalá lo hagan los miles de infractores e irrespetuosos como un acto de contrición para respetar la autoridad y comportarse como debe ser. ¿Será mucho deseo?