Poco a poco y tras casi un año de pandemia, está aumentando la confianza de los colombianos frente a la vacuna contra el coronavirus, cuya aplicación ya se empezó a dar, inicial y razonablemente, en personal de la salud y en mayores de 80 años.
Las cifras nacionales del Dane así lo corroboran: El 64% de los colombianos estaría dispuesto a vacunarse. Ahora, el nivel de ciudadanos que no se inmunizarían está en el 35,2%.
Vale la pena recordar que a finales del año pasado, el 44,2% de los colombianos había expresado ciertos temores frente a la vacuna y no estaba dispuesto a recibirla.
El propio director del Dane, Juan Daniel Oviedo, ha destacado ese aumento significativo en la confianza en la vacunación, en el entendido en que más gente se vacune el país alcanzará la inmunidad de rebaño para detener la propagación del coronavirus.
Si bien el dato global es trascendental, es importante detenerse en los resultados locales. Riohacha es la ciudad en la que confían más en las vacunas. En esa ciudad tres de cada cuatro (72,5 por ciento) respondieron que recibirían las dosis. En aceptación le siguen Medellín (69,2 por ciento), Pasto (68,4), Barranquilla (66,7), Cartagena (65,1), Quibdó (64,9), Manizales (64,7), Tunja (63,9), Pereira (61,9) y Bogotá 61,8), que están por encima del promedio nacional. Las ciudades con personas más reacias a recibir las vacunas, según las encuestas de noviembre-diciembre a enero-febrero, fueron Ibagué (54,1 por ciento), Neiva (52,6), Bucaramanga (51,2), Florencia (50,1) y Cali (42,2).
Frente al caso de Neiva, en donde hay que señalar, sin embargo, que la confianza hacia las vacunas ha aumentado en los últimos meses, es clave que las autoridades de salud emprendan un plan sobre la utilidad de las inmunizaciones.
La vacunación es un paso seguro y definitivo en el camino hacia controlar por completo la pandemia y evitar la dolorosa estela de muertos.
“La vacunación es un paso seguro y definitivo en el camino hacia controlar por completo la pandemia y evitar la dolorosa estela de muertos”