Humberto Silva Cuellar
Ante los acontecimientos políticos registrados los últimos días en Estados Unidos, la supuesta “democracia” más importante y poderosa del mundo, viene a mi memoria, acontecimientos similares ocurridos en Colombia, después de la Constitución de 1.991, donde la diáspora política fue evidente, apareciendo múltiples partidos de derecha, centro e izquierda, que generaron inclusión de minorías y otras fuerzas de expresión.
Anteriormente a ello, quiero hacer remembranza de los orígenes de los partidos políticos en Colombia, solamente , desde la revolución del medio siglo (1.850), bajo el gobierno de José Hilario López, se configuran ideológica y políticamente los partidos Liberal y Conservador, el primero, bajo los ideales de Ezequiel Rojas, identificados con el color rojo, y apoyado por comerciantes, artesanos y poblaciones libres, ( libertad de los esclavos en 1851) que querían cambios en la estructura económica, social y política y apoyaban el comercio y la actividad económica, y el partido Conservador, bajo los ideales de Mariano Ospina Rodríguez y Miguel Antonio Caro, apoyados por terratenientes y la Iglesia Católica , que por tal razón , cercana a la vocación Mariana , se identificó con el color azul y predominó en poblaciones campesinas.
A pesar de estas diferencias, muchos liberales se volvieron terratenientes y terminó en una “mescolanza de alianzas”, que le dio el poder al partido Conservador, con altibajos en el poder, hasta 1.930, que, con la masacre de las bananeras, le costó el poder y se inicia la república liberal.
Bien o mal, se identificaban los dos bandos, en la mayoría de la historia republicana casi irreconciliables, hasta el Frente Nacional, con predominio social de los liberales que impulsaron, reformas agrarias, libertad de esclavos, mejores condiciones salariales para las masas trabajadores y apoyo al campesino con la creación de la ANUC (Asociación Nacional de Usuarios Campesinos) y el Grupo de Integración Subregional Andino, entre otros, en el gobierno de Lleras Restrepo. (1.966-1.970)
Después de la Constitución de 1991, se dio un paso grande en la inclusión política y social del país, abriéndose paso partidos políticos para todos los gustos. Hoy vemos que el partido Conservador perdió su liderazgo, e identidad propia y se convirtió en grupos, que tiene que hacer alianzas para llegar al poder. El poderoso partido Liberal, se disgregó en el partido de la U, creado sin bases ideológicas propias; luego el centro democrático que le pasa igual; por los lados de la izquierda pasa lo mismo, la Colombia humana, el partido Verde, el partido de las Farc, entre otros, consolidando -solo por intereses políticos-, la extrema derecha, la extrema izquierda y los partidos de centro.
En Colombia, la Corte Constitucional, prohibió la reelección presidencial.; en el caso de Trump, hasta su partido le dio la espalda, pues quieren evitar que lleguen Gobiernos populistas, tipo Colombia, Brasil y Venezuela y muy seguramente será desaparecido del espectro político del país, para no revivir las etapas ya superadas, en épocas de la doctrina Monroe,
Lo contrario ocurre en nuestro país, Brasil y Venezuela, donde se aferran al poder, a costa de la pobreza e ignorancia, contario al ejemplo norteamericano.
Es hora de ser civilizados y respetuosos y generar consensos que nos ayuden a un mejor vivir para todos los colombianos y el mundo entero.