La Nación
La Gorkymanía 1 29 marzo, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

La Gorkymanía

El Alcalde Gorky Muñoz se le convirtió en una obsesión endeudar aún más el municipio. Las manías son actitudes que pueden ser desproporcionadas ante una situación, tanto así que las personas también pueden llegar a experimentar cierta psicosis, incluidas alucinaciones y delirios que pueden llegar a separarse de la realidad; así como creer que Neiva administrativamente va bien y que los soportes técnicos son suficientes.

El proyecto de endeudamiento por 25.500 millones de pesos pasa por quinta vez en el concejo de Neiva, y hoy está más cerca que nunca. Los principales responsables de esta aprobación son los concejales de la Gorkymanía: Jesús Garzón, Deiby Martínez, Jaime Unda y Alejandro Serna (quien dio ponencia positiva), quienes hoy lideran las mayorías a favor de esta iniciativa en la Comisión Segunda de Presupuesto, Hacienda y Crédito Público, todos ellos con sus respectivas razones e intereses, como diría Peñalosa “impopulares pero eficientes”, eficientes en seguir la línea del Alcalde.

Las cifras no mienten, ya que en realidad Neiva no va bien, según el DANE tiene una inflación del 13,61% por encima de la media nacional; la tasa de desempleo  es del 11,6%; el Índice de Competitividad para 2022 realizado por el Consejo Privado de Competitividad y la Universidad del Rosario ubica a Neiva en la posición 12 registrando un puntaje de 5.48 sobre 10 mostrando que la ciudad sigue estancada desde hace 3 años en competitividad; en seguridad, según el DANE en su última Encuesta Pulso Social, 8 de cada 10 ciudadanos manifiestan no sentirse seguros en Neiva, los atracos han incrementado más del 45% y según el panel de expertos de la más reciente medición de la firma Cifras y Conceptos califica el rendimiento de Gorky en todos los sectores con tan solo un 39% de aprobación.

Y ni que decir del incremento desmedido de contratistas pasando de 539 a finales de 2019 a 2.893 en 2022, eso representa un incremento en el gasto de aproximadamente 28 mil millones de pesos, donde aún hay varias cuentas por pagar; y entonces ¿con qué confianza le dejan otros 25.500 millones de pesos, si con los 60 mil millones de pesos anteriores no se vio la terminación de las obras?

La Gorkymanía es saber que algo está mal, pero justificada en qué todos sabíamos que iba a ser así y quien piense diferente está atacando la administración, como un delirio de persecución. Esperemos que los concejales analicen su futuro político, porque ya las estructuras no son suficientes.